Itongadol.- Cuando en la última semana de diciembre de 2015 en un mensaje atribuido al líder de ISIS Abu Bakr Al Baghdadi dirigido al Estado de Israel y a la población judía, se expresó: “Estamos acercándonos cada día mas a ustedes, no se piensen que nos olvidamos”, “D-os ha hecho que se reúnan en Israel para hacer la guerra más fácil… Palestina será su tumba”.
Hace que la mayoría de los observadores miren hacia lo que está aconteciendo en Siria e Irak en torno a la guerra civil que las desgarra, y en función de la intervención rusa en ese conflicto sumada a la de los países occidentales como a la injerencia iraní y de sus milicias hace suponer que estas palabras suenen huecas, sin sentido. Pero debemos considerar también que hay un frente que no debemos olvidar, si es que dejamos de lado la situación en el Reino de Jordania y que podría dar origen a otro artículo de análisis, y es la del terrorismo en la Península de Sinaí que no solo no está contenida sino que se va a potenciar en el futuro cercano poniendo en peligro la estabilidad política de Egipto y que afectará a Israel en una forma todavía no cuantificada.
Para resumir y hacer un recuento de la situación en el Sinaí debemos decir que siguiendo los acuerdos de Camp David en el año 1979 Israel se retiró de la península, que volvió a estar bajo soberanía Egipcia con la limitación de zona desmilitarizada. El estado de abandono y desgobierno a la que Egipto sometió a la región se vio potenciado por la revolución islamista del 2011 que derroco a Hosni
Mubarak que facilito la formación de milicias siendo la más fuerte la denominada Ansar Bait al-Maqdis que en Noviembre de 2014 juraron lealtad a ISIS y declararon a la península parte de las provincias del Califato lo que la convirtió en una zona de confluencia de terroristas foráneos de países como Yemen, Sudan, Algeria, Arabia Saudita, Libia, Siria y a ex miembros de Hamas en Gaza
coordinados por el Concilio de Asuntos Internacionales de Isis con base en la ciudad de Raqqa en Irak, esto según información recibida por agencias de inteligencia occidentales, con la esperanza de derrocar al régimen herético Egipcio que termino con la revolución islámica en ese país y exterminar al gran enemigo Israel.
A todo esto debemos sumar el tráfico ilegal de armas y sobre todo al saqueo de los depósitos militares en Libia que incluyen sofisticados misiles anti-tanque y tierra-aire los que ya fueron usados en varias oportunidades contra objetivos civiles y militares.
Para avalar lo dicho anteriormente podemos destacar las siguientes actividades terroristas que se destacaron en la península:
-Febrero de 2011 primer ataque a las líneas de gas que abastecen Israel en el Sinaí.
-Agosto de 2011 primer ataque coordinado desde la frontera contra Eilat en el que fueron atacados varios vehículos civiles y dos ómnibus de línea israelí con un saldo de 8 israelíes asesinados y 40 heridos.
-Julio de 2012 un segundo ataque a las líneas de gas que abastecen a Israel se produce en el Sinaí.
-Agosto de 2012 un convoy del ejército Egipcio es emboscado provocando la muerte de 16 soldados.
-Septiembre de 2012 ataques contra puestos de frontera israelí en Nitzana y Kerem Shalom se producen dejando un soldado israelí muerto.
-Noviembre de 2012 el ejército egipcio detiene un cargamento de 185 conteiner en el Sinaí compuestos de misiles anti-tanques, municiones anti-aéreas, minas terrestres, RPG’s, granadas y municiones por un valor total de 3,3 millones de dólares.
Ataques y decomisos como estos prosiguieron durante todo el periodo comprendido entre el 2013-2015 dejando decenas de muertos en
Egipto y derribando en el 2014 un helicóptero de combate del tipo Apache egipcio, pero podemos decir que el más grave de estos actos
fue el derribo del avión de pasajeros rusos a fines de 2015 que dejo un saldo de 224 pasajeros muertos, sumado a otro ataque fallido no
informado el 23 de Agosto a un vuelo procedente de Londres de la empresa Thomson Airlines con 189 pasajeros y que fue atacado con
un misil que falló el blanco por 300 metros cuando este avión descendía en el aeropuerto de Sharm El-Sheikh.
Todo esto sumado a transferencias de capitales y comunicaciones detectadas por el servicio de inteligencia israelí para la compra de armas y coordinar actividades en la región, a que importantes defectores de Hamas y operativos de otras regiones se han sumado aportando su conocimiento bélico y al último mensaje de su líder Al-Baghdadi hacen suponer que la frontera sur se convertirá en un punto de conflicto no solo para el gobierno egipcio, que ira incrementándose y del cual tendremos lamentablemente noticias en un futuro cercano con acciones cada vez más osadas.