Itongadol.- El director general de la Agencia Judía para Israel, Alan Hoffmann (foto), llegará la semana próxima a Brasil y la Argentina, donde estará del 20 al 23 de marzo, según anunció a la Agencia Judía de Noticias (AJN) su representante en América Latina, Claudio Manaker.
“La visita tiene que ver con que en la Argentina tenemos la comunidad judía más grande de Latinoamérica, que históricamente -y me imagino que también en el futuro- tiene un rol importante para todas las comunidades” de la región, explicó.
“En la agenda hay un prolongado encuentro con el liderazgo de las instituciones que tienen relación con la Agencia Judía y el tema fundamental tendrá que ver con la iniciativa del gobierno de Israel de asegurar la continuidad judía en la Diáspora, de la cual él es uno de los arquitectos”, pero también “será un eje central la educación” y el “ayudar a poner un poco más de energía en el accionar de BAMA”, anticipó el funcionario.
“La educación es un eje central del quehacer de la Agencia Judía y hoy la misión es conectar a los jóvenes con su judaísmo a partir del contacto con Israel, buscando constantemente nuevas formas de instalarlo en su identidad”, resumió Manaker, quien destacó que “en la educación formal y no formal hay espacios que están resurgiendo, otros que están estancados y algunos nuevos que habrá que generar”.
En tanto, “BAMA ya es una fundación local y viene a ser el tutor de las políticas educativas que tienen que ver justamente con conectar a los jóvenes con Israel”, pero “hay que seguir desarrollando este espacio para que la mayor cantidad de instituciones que tienen que ver con el quehacer educativo formal y no formal puedan articular con ella y, a través de la misma, no solamente con la Agencia Judía, sino con las fundaciones que apoyan su accionar desde hace años, como (el Fondo) Pincus”, aseguró.
Por otra parte, el representante de la Agencia Judía para Israel en América Latina consideró que “hay tres niveles de acción que la realidad de esta generación de educadores que se está formando exige poner el énfasis”.
“Por un lado, ‘aggiornar’ la forma en que se pasan los contenidos; para dar un ejemplo: junto con la Organización Sionista Mundial estamos relanzando un jidón (certamen) para adolescentes centrado en el sionismo, y en lugar de imprimir cuadernillos, se creó un espacio para que los chicos puedan estudiar directamente en el campus virtual de BAMA, no solamente leyendo, sino viendo películas o escuchando música de eventos históricos”, afirmó.
En segundo lugar, Manaker aseveró que si bien “hoy Israel es un país fuerte y una potencia mundial a nivel económico, científico y de alta tecnología, todavía necesita del intercambio con la Diáspora para fortalecer su propia condición judía”, y en este contexto, “Israel, la Diáspora y la diáspora israelí tienen que crear un diálogo para resignificar los contenidos” educativos.
“Y por último, el espacio cuantitativo que la educación judía tiene en la carga horaria de los colegios desgraciadamente se fue perdiendo en los últimos años, pero por otro lado, sigue teniendo un significado central que hace la diferencia con otra institución de educación formal, movimiento (jalutziano) o Departamento de Juventud de club o sinagoga; entonces, tenemos que crear un espacio para que estos educadores estén preparados para el desafío, que hoy tal vez es más difícil que en otras generaciones, de conectar a los jóvenes con su judaísmo en este mundo global de identidades múltiples”, finalizó.