Itongadol/AJN.- El Centro Wiesenthal reclamó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) José Miguel Insulza, que condene el exabrupto antisemita por parte del Representante Permanente de Venezuela, embajador Roy Chaderton Matos, manifestado durante la reunión anual de la Asamblea General que se desarrolla en Guatemala.
La polémica surgió durante el Diálogo de la Sociedad Civil con el secretario general cuando un delegado venezolano, Lorent Saleh, (Red Democracia Joven de las Américas), cuestionó la legitimidad de las recientes elecciones presidenciales en su país.
Fuera de agenda, irrumpió el embajador Chaderton Matos, que exigió el uso de la palabra y acusó a Saleh (cuyo abuelo inmigró a Venezuela desde Ramallah) de ser “un agente palestino financiado por el Mossad, que es un organismo terrorista”.
A través de una carta enviada por el director de Relaciones Internacionales del Centro Wiesenthal, Shimon Samuels, y el representante de organismo en América Latina y delegado del Centro en la OEA, Sergio Widder, se le transmitió a Insulza que “esta incitación provocadora por parte del embajador Chaderton Matos durante una sesión presidida por Ud. demanda una vigorosa condena de su parte”.
“Con satisfacción, reconocemos a la mayoría de los más de 300 delegados de la sociedad civil de las Américas que abuchearon la intervención del diplomático venezolano. Ese lenguaje no representa al pueblo de Venezuela ni a los principios de la OEA”, expresaron los representantes del Centro Wiesenthal.
Asimismo, Samuels apuntó que “semejante discurso es un reflejo de la sombra de Teherán en la región y el intento por parte del régimen demagógico venezolano de distraer la atención sobre sus malos manejos políticos y económicos a través de la búsqueda racista de un chivo expiatorio”.
“Chaderton Matos debe ser considerado responsable por cualquier agresión subsiguiente contra la comunidad judía venezolana. Sus palabras desmienten al presidente Nicolás Maduro, que aseguró hace dos semanas que en Venezuela no existe el antisemitismo”, agregó, por su parte, Widder.
“Cuando el Centro cuestionó de manera privada al embajador Chaderton Matos por haber introducido un elemento discordante sobre el Medio Oriente en medio de un debate sobre las Américas, fuimos rechazados de modo arrogante e invitados a ‘decir lo que quisiéramos’”, apuntó el director.
Finalmente, Samuels y Widder manifestaron la solidaridad del Centro Wiesenthal con la comunidad judía venezolana y “a favor de la tolerancia cero para el odio en las Américas”.
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