Aunque esta cifra es similar a la registrada en los últimos años, es inferior al crecimiento registrado en los años previos a que comenzara la Intifada palestina
en septiembre de 2000. Antes de que comenzara el alzamiento palestino, el número de colonos en los territorios aumentaba en torno al 8 por ciento anualmente, según esta fuente.
El 74% de los colonos vive en zonas que permanecerán bajo soberanía israelí tras la firma de un eventual acuerdo de paz, según los mapas publicados en base a los distintos planes de paz. De ellos el 35% (85.672) residen en el área del Gran Jerusalén y el 21% (50.830) en Samaria (oeste).
En el área de Gush Katif, de donde se supone que serán evacuados los colonos, hubo un aumento del 5,95%, un poco más que la media de nacimientos. Además, los tres asentamientos que serán evacuados en primer lugar en virtud del plan de separación del primer ministro Ariel Sharon registraron un crecimiento mucho mayor: Kfar Darom (21,5%), Netzarim (13%) y Morag (12,3%).
Dos terceras partes del crecimiento en el número de colonos pueden atribuirse a la alta tasa de natalidad entre esta población (3,5%), mientras que el tercio restante corresponde a colonos que se trasladaron a los asentamientos en el último año.
Por otra parte, de los 146 asentamientos ilegales, 129 aumentaron su tamaño pero sólo 64 por encima del número de nacimientos. Mientras, la colonia de Sa-Nur, en la zona de Samaria, que se encontraba supuestamente vacía, ha recibido la llegada de grupos de ultraortodoxos y registró un crecimiento del 146% en los últimos doce meses, pero deberá ser evacuada en virtud del plan de separación.
Fte E.Press