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El ministro de justicia de Israel, Yaakov Neeman, dijo hoy que Israel está tomando medidas para expulsar a los infiltrados del Estado Judío, y agregó que todas oficinas del gobierno están trabajando para eliminar la “plaga” del país.
Hablando en una conferencia de leyes en Eilat, Israel, Neeman dijo que su país está empleando una estrategia de varios frentes, la cual incluye “construir una valla en toda la frontera egipcia, la cual está en sus etapas finales; expulsar inmigrantes; y establecer instalaciones para albergarlos hasta que se encuentre una solución”.
“Israel está tomando medidas para expulsar a los infiltrados de Israel en la primera oportunidad que tenga”, dijo Neeman, quien agregó su esperanza de que sean devueltos a sus países o a naciones del tercer mundo.
También el lunes, en un encuentro del Comité de Trabajadores Extranjeros de la Knesset (parlamento israelí), miembros de éste criticaron al gobierno y a las políticas de la corte sobre los infiltrados extranjeros y demandaron una solución para el influjo de inmigrantes americanos en el sur de Tel Aviv.
La sesión abrió con la única voz en apoyo de los infiltrados, el jefe de comité Nitzan Horowitz (de Meretz), quien condenó al gobierno como racista, y pidió una “nueva política responsable” para lidiar con el problema. “Su gobierno del ala derecha no ha hecho nada más que declaraciones racistas”, dijo Horowitz, quien también expresó que la política existente es una “falla total” y echó la culpa al ministro del interior, Eli Yishai (de Shas), por el problema.
El resto del comité de la Knesset mostró menos simpatía pro los inmigrantes que Horowitz, y el miembro Danny Danon (de Likud) dijo que eran “enemigos”. Mientras, el miembro Ofir Akunis (de Likud) dijo que representaban “una bomba de tiempo social” y el miembro Dov Henin (de Hadash) dijo que la situación era una “crisis” y una “catástrofe”.
El comité invitó la vice alcaldesa de Tel Aviv, Meital Lehavi, para dar un aporte sobre la situación en la parte sudeste de su ciudad. “Los refugiados se establecieron en lugares débiles donde pueden vivir por menos dinero. No tengo duda de que lo mejor es trasladarlos a otros lugares de Israel y no mantenerlos en estos espacios, como el sur de Tel Aviv”, dijo.