El primer ministro israelí le pidió responsabilidad financiera al país en el encuentro del gabinete. “Si nos enfrentamos a un colapso económico no resolveremos los problemas”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo hoy que Israel necesita soluciones responsables pero sensibles a los problemas socioeconómicos que han llevado a las protestas en todo Israel, que no pongan en bancarrota al país.
Hablando en el comienzo del encuentro semanal del gabinete, Netanyahu dijo que le indicó al argentino Manuel Trajtenberg, que encabeza el nuevo comité socioeconómico: “Entregue soluciones concretas en el mes de septiembre, lo más rápido posible, pero no de manera apresurada. Estamos tratando con temas complejos. Tenemos intenciones de llegar a soluciones concretas, no generalizaciones, de problemas concretos para reducir el costo de vida y cerrar los huecos del Estado de Israel, que incluyen aquellos entre la periferia y el centro”.
Durante su primer encuentro la semana pasada, el comité Trajtenberg se dividió en un número de subcomités que se encargarán de distintos temas: impuestos, competición y alto costo de vida, servicios sociales y viviendas.
Además, otro subcomité se encargará de lidiar con cuanto costarán las nuevas propuestas, y de dónde saldrá el dinero, y otro subcomité se encargará de cómo conducir el diálogo con el público.
Netanyahu dijo hoy que quiere que el comité encuentre “soluciones que sean económicamente posibles”. Advirtió contra el peligro de que Israel sufra el destino de algunos países europeos que han sido golpeados duramente por la crisis económica global.
“Si terminamos en bancarrota o nos enfrentamos a un colapso económico, una realidad en la que algunas economías líderes europeas se encuentran hoy en día, no resolveremos ni los problemas económicos ni los sociales. Por lo tanto, se les demanda responsabilidad financiera junto con sensibilidad social. Esa es la fórmula necesaria que traerá soluciones prácticas”, dijo.