Veintisiete senadores, demócratas y republicanos, le enviaron ayer, martes, una carta a la secretaria de Estado de los Estados Unidos, Hillary Clinton, pidiéndole que especifique los pasos que el gobierno de Barack Obama (ambos en la foto) está tomando para poner fin a la incitación palestina contra los judíos e Israel.
La iniciativa, impulsada por el legislador republicano por Illinois Mark Kirk y su par demócrata por Nueva York Kirsten Gillibrand, fue consecuencia del asesinato de la familia Fogel en Itamar y el atentado terrorista en Jerusalem.
La misiva refiere “la continua la incitación contra los judíos e Israel en los medios de comunicación, mezquitas y escuelas palestinos, e incluso de individuos o instituciones afiliadas a la Autoridad Palestina”.
“La masacre de Itamar fue un recordatorio aleccionador de lo que importan las palabras y de que la incitación palestina contra los judíos e Israel puede conducir a la violencia y el terrorismo”, escribieron los senadores.
Por ello “la instamos (a Clinton) a que redoble sus esfuerzos para convencer a los líderes palestinos de que seguir condonando la incitación no es tolerable”.
La carta menciona algunos ejemplos, como el de Sabri Saidam, asesor del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, quien el 9 de marzo dijo en un discurso que las armas palestinas deben girarse hacia Israel y que el aniversario de la muerte de Dalal Mughrabi (uno de los autores de una masacre en una ruta costera, en 1978) debería conmemorarse con la inauguración de una plaza en su nombre en la ciudad de El-Bireh.
Mughrabi fue homenajeado en un programa de la televisión palestina, el 9 de febrero.
Y el 24 de enero, el gobernador de Jenín le confirió una beca presidencial de 2.000 dólares a la familia del terrorista palestino Khaldoun Samoudi, quien fue abatido cuando intentaba detonar dos bombas contra soldados israelíes en el cruce de Bekaot.
La misiva también cita al diario Al Hayat, que informó que el 2 de enero, Azzam al-Ahmed, un miembro del Comité Central de Fatah, asistió a una reunión por el 46º aniversario de la creación del partido oficialista, durante la cual fueron dinamitadas maquetas de edificios en asentamientos.
Al-Ahmed habría historiado los ataques terroristas perpetrados por Al Fatah y dicho que éste “es un movimiento de masas que cree en la revolución popular y defiende su derecho a utilizar todos los medios de resistencia a fin de lograr su objetivo”.
“Educar a la gente para la paz es fundamental para establecer las condiciones para una paz segura y duradera”, consideraron los senadores norteamericanos.
La carta alentó a Clinton a concentrarse en “programas adecuados de formación y educación en la Margen Occidental y Gaza que promuevan la coexistencia pacífica con Israel”.
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