Todas las 15 naciones miembro aprobaron que la situación de los choques mortales en Libia sea tratada en el tribunal permanente de crímenes de guerra. La ONU estima que más de 1.000 manifestantes fueron asesinados por las fuerzas militares del líder libio en los golpes violentos.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha votado de manera unánime ayer para imponer sanciones al líder libio Muammar Gadhafi, sus cinco hijos adultos y altos asociados, en luz de la emergencia de violencia en las protestas opositoras en Libia.
En una votación después de la discusión, interrumpida varias veces para consultas con las capitales, los miembros aceptaron congelar los fondos de Gadhafi, sus cuatro hijos y una hija, y prohibirle viajar a toda la familia y a diez asociados.
Todas las 15 naciones miembro aprobaron enviar el caso al tribunal permanente de crímenes de guerra.
El consejo demandó “una finalización inmediata de la violencia y escuchar las demandas legítimas del pueblo” en Libia.
También le pidió a las autoridades libias que actúen “con resguardo, en respecto a los derechos humanos y la ley humanitaria internacional”, y que faciliten el acceso inmediato a los monitores de derechos humanos internacionales. Además se solicitó un inmediato levantamiento de las restricciones “en todos los tipos de medios” y de asegurarles su partida a salvo a los extranjeros.
Bajo el embargo de armas, los miembros de la ONU tomarán medidas inmediatas y necesarias para “evitar la provisión directa o indirecta, o la venta o transferencias a Libia de armas y materiales relacionados de todo tipo, incluyendo armas y municiones a vehículos militares y equipos”. También se le prohibirá a Libia que importe todo tipo de armas y objetos parecidos de los miembros de la ONU y ellos le prohibirán su exportación.
Un punto saliente en las discusiones fue cómo referirse a lo que estaba ocurriendo en Libia. El borrador del día interior refería al país a la Corte Criminal Internacional (CCI) por los ataques “masivos y sistemáticos” en los manifestantes civiles, que resultaron en crímenes contra la humanidad.
China y, aparentemente, otros miembros se opusieron a la referencia de la CCI, dilatando la finalización del borrador. Los diplomáticos dijeron que el compromiso había dejado a la CCI, pero que la transferencia no se haría de manera inmediata.
La ONU estima que más de 1.000 personas fueron asesinadas por las fuerzas militares de Gadhafi desde que emergieron las protestas pro-democracia el 15 de febrero, las cuales emularon de Túnez y Egipto, que terminaron por derrocar a los líderes que habían estado en el poder por décadas.