Kollek murió el pasado martes a los 95 años de edad y fue enterrado hoy en el cementerio nacional del Monte Herzl, en la zona reservada a grandes personalidades de Israel.
Al sepelio asistieron, entre otros, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, el viceprimer ministro, Simon Peres, y el presidente, Moshe Katsav. Olmert dijo durante la ceremonia que «hubo alcaldes antes de Kollek y los seguirá habiendo después de él, pero nunca volverá a existir otro Teddy Kollek».
A Kollek se le atribuye haber presidido exitosamente la reunificación de la ciudad santa tras la guerra de 1967 y haber impulsado la coexistencia pacífica de su población mixta musulmana y judía. Permaneció en la alcaldía de la capital entre 1965 y 1993, después de que Olmert, con su ultraderechista partido Likud, se la arrebatara tras proclamarse ganador en las elecciones celebradas aquel año.
Padre de dos hijos y abuelo de cinco nietos, estuvo hasta el último momento en contra de la construcción de colonias judías en Cisjordania.