Baharati pone en escena a seis cantantes, 60 bailarines, 16 músicos y más de 500 trajes. La obra cuenta la historia de una joven de clase baja de la India, llamada Baharati (nombre hindú del país), que se enamora de un millonario ingeniero, Varnassi, que vive en Estados Unidos y visita su hogar por trabajo.
Cuando su padre le insiste para que se case con el marido que le eligió, y que pertenece a su mismo nivel social, ella debe escoger entre su corazón y la tradición.
«Es un argumento simple, como la mayoría de las películas de la industria de la India», aseguró Gideon Kapan, un diseñador de sonido israelí involucrado en la producción desde el principio.
«Lo que es nuevo es la puesta en escena, algo nunca antes realizado en la India. El país tiene una cultura de películas. Ellas producen un gran impacto, son baratas y todos las pueden disfrutar».
El equipo israelí que trabaja en el musical estuvo encargado de adaptar a los ojos y oídos occidentales los films de Bollywood (nombre con el que se conoce a la industria hindú), así como a contribuir a la producción teatral, que es casi inexistente en la India, un país que produce más de 800 películas por año.
Además de los artistas, la obra cuenta con el diseñador de vestuario Ariun Bhasin, un importante creativo que trabajó en la película «Monsoon Wedding» de Mira Nair. Por otra parte, habrá una orquesta tocando auténtica música autóctona con instrumentos tradicionales.
«La música es una parte increíble de la cultura hindú desde hace miles de años, y no se conoce nada igual en el mundo en términos de riqueza», confesó Kapan.
La producción también incluye un show multimedia creado por un fotógrafo israelí que pasó cuatro meses viajando por la India.
«Israelíes e hindúes son increíblemente similares en términos de conflicto entre la modernidad y la tradición, y las intensas relaciones familiares que caracterizan ambas culturas», sostuvo Anat Bernstein-Reich, responsable de la colaboración israelí en la obra. «Esta es una de las razones por las que los equipos de los dos países trabajan tan bien juntos».
«Estoy segura de que todos saldrán bailando de ver Baharati», confesó Bernstein-Reich
Fuente: Jerusalem Post
Traducción: Leila Mesyngier