Itongadol.- En el salón auditorio de la AMIA, la primera escuela hebrea para niños y jóvenes con necesidades especiales Hamakom Shelí celebró la finalización del año escolar 2017 con una fiesta en la que participaron todos los alumnos de la institución, representando diversos cuadros, que denominaron “Ocho escalones”, cuyo tema principal era “el tiempo”. La escuela tiene abierta la inscripción para el ciclo lectivo 2018.
Silvia Reisin, directora de la institución, luego de agradecer a la AMIA por cederles el lugar para hacer la fiesta de fin de curso, agradeció “a los alumnos de la escuela Sholem Aleijem “que durante todo el año, los viernes nos acompañan para celebrar el Kabalat Shabat junto con Federico, el madrij que acompaña esta experiencia; a los alumnos del Martín Buber, que son los que este año conforman el grupo de Rikudim integrado que tenemos, llamado Jai; y especialmente a la profesora Jana Yarak, que hace años que esta junto a nosotros”.
Luego explicó la importancia que tiene el concepto del tiempo en el judaísmo y en la tarea educativa: “La idea del tiempo nos posiciona en un lugar para pensar que todo trabajo conjunto que realicemos impactará definitivamente sobre nuestros alumnos, y ello nos permitirá ensanchar y encontrar un camino para desarrollar oportunidades más enriquecedoras para ellos”.
La manera en la que los alumnos de Hamakom Shelí interpretaron cada uno de los “Ocho escalones” son un ejemplo de cómo quienes están al frente de esta especial institución educativa encontraron el camino enriquecedor para los alumnos.
Por su parte, el presidente de la institución, Yaco Mizrahi, manifestó: “Hoy estamos contentos, señal de que la escuela funciona, que el personal de la escuela pone todo su empeño para que nuestros hijos salgan adelante, algo muy valorado a través de los años”.
Asimismo, consideró que el año transcurrido “pasó muy rápido”, y realizó una reseña histórica de la institución desde que fue fundada en 1992, por los lugares donde funcionó hasta su actual sede. “Tenemos un edificio hermoso; dos hogares para los chicos que no tienen dónde vivir, uno de mujeres y otro de varones; tenemos un hotel [en Miramar] que está funcionando, destinado a que los chicos puedan ir, pero todavía no lo logramos y ese es el gran desafío para este año, para lo cual le pido a los padres que nos ocupemos entre todos y armemos excursiones para que los chicos puedan ir a Miramar, con algunos maestros y padres. Ustedes siempre me ven a mí, pero no soy yo solo, hay gente que trabaja y son muy importantes: los directores, los maestros y personas que no tienen ningún alumno en la escuela y que ayudan. Entre esas personas silenciosas, que ustedes no conocen, quiero invitar a uno a que les dirija unas palabras: Elías Hamui, el representante legal de la institución”, y resaltó la permanente colaboración de AISA – Asociación Israelita Sefardí Argentina de Beneficencia.
Elías Hamui, quien hasta hace semanas presidiera AISA, explicó que cuando conoció a Hamakon Shelí en los años de su fundación sintió “la necesidad de ayudar a que esa pequeña semilla fructificara y llegará a lo que es hoy”. “La comunidad nuestra se caracteriza por ayudar y por sentir que el problema y la situación de cada uno de nuestros hermanos es también la nuestra, eso me movió a acercarme a Hamakom Shelí”.
“Debemos agradecer la época que vivimos, donde lo diverso es parte de lo cotidiano. No somos todos iguales, todos tenemos un tipo de diversidad. Nadie está preparado para una situación como la que les toca a los padres cuando vinieron sus hijos al mundo, pero lo principal es dar amor y saberse apoyado. Todos los miembros de Hamakom Shelí están trabajando para que estos chicos estén cada vez mejor; este tipo de obras me enorgullece”, agregó.
Concluida la actuación de los alumnos de Hamakom Shelí, resultado de una labor que se debe resaltar y que muchas veces no es conocida por la mayoría de los miembros de la comunidad, ItonGadol dialogó con Yaco Mizrahi sobre el hotel en Miramar: “Construimos el hotel para que nuestros chicos pudieran conocer el mar, un hotel que tiene baños para discapacitados al igual que algunas habitaciones y rampas, pero un hotel que se usa todo el año; para todas las instituciones que lo requieran. Este año han ido seis instituciones, se hicieron excursiones, han ido un grupo de 12 de nuestros alumnos en marzo pasado, algo que vamos a repetir pues queremos que vaya toda la escuela; y también está abierto al público en general”.
El Hamakom Hotel posee 40 habitaciones, el ser vicio es kosher y los interesados pueden consultar directamente en hotelhamakom.com.ar