Itongadol/AJN.- Hay opiniones divididas sobre si era un disidente o un "chupamedias" – o ambos – mientras sobrevivía durante la era de Stalin. Después de la Segunda Guerra Mundial participó con valentía en la organización de la primera recopilación de material documental sobre las víctimas soviéticas-judías del Holocausto, aunque su publicación terminó siendo prohibida.
El 31 de agosto de 1967, Ilya Ehrenburg, escritor soviético judío que mantuvo una línea que estaba entre disidente y adulador político, y al hacerlo, sobrevivió al reinado de Joseph Stalin, murió a los 76 años de cáncer en Moscú, informó el medio israelí Haaretz.
Ehrenburg produjo unos 100 libros, incluyendo obras de poesía, ficción, comentario político e historia. Tan emocionalmente poderoso era su periodismo durante la Segunda Guerra Mundial que el ministro de Asuntos Exteriores soviético, Vyacheslav Molotov comentó, que él "valía varias divisiones". Después de la guerra participó con valentía en la organización de la primera recopilación de material documental sobre las víctimas soviéticas-judías de la Holocausto, aunque Stalin terminó prohibiendo su publicación.
Ehrenburg nació el 27 de enero de 1891, en Kiev, entonces parte del imperio ruso. Sus padres eran judíos, pero su familia no era religiosa observadora y el no aprendió ni hebreo ni Yiddish al crecer. Su padre era ingeniero y cuando consiguió un trabajo como director de una fábrica de cerveza de Moscú, en 1895, la familia se mudó a esa ciudad.
Después de la revolución de 1905, Ehrenburg, un estudiante del Primer Gymnasium de Moscú, se involucró con los bolcheviques, junto con su amigo y compañero de clase Nikolai Bujarin, un futuro líder político y teórico – y víctima de la purga. En 1908 fue detenido por cinco meses por la policía zarista por participar de actividad subversiva, antes de ser liberado con la condición de que emigrara. Su ciudad elegida fue París.
La vida del escritor estuvo marcada por la ambivalencia y zigzags. En el fondo no era un bolchevique, pero su voluntad de servir al régimen comunista no sólo lo protegió, sino que también lo puso en condiciones de ayudar a sus amigos y compañeros artistas que habían entrado en conflicto.
Cuando Stalin firmó un pacto de no agresión con Hitler en 1939, Ehrenburg estaba tan angustiado que por ocho meses no pudo tragar alimentos sólidos. Sin embargo, cuando, en junio de 1941, Alemania declaró la guerra a la URSS, se convirtió en una corresponsal del periódico Estrella Roja del Ejército, asumiendo el papel de mantener la moral en el frente. En su poema "Kill" de 1942 escribió: "No cuentes los días; no cuentes las millas. Cuenta sólo el número de alemanes que has matado".
También se unió a otros intelectuales y artistas judíos en el Comité Judío Antifascista, que promovía el buen nombre de la Unión Soviética en el extranjero durante la guerra, pero, a diferencia de la mayoría de sus otros miembros (como el actor yiddish Salomón Mikhoels), no fue asesinado cuando Stalin disolvió la comisión. Él dijo que no (tres veces), cuando se le pidió que firmara una petición condenando a los médicos judíos del Complot de los Doctores, en 1952, e incluso escribió a Stalin advirtiéndole que castigar a los judíos causaría un desastre de las relaciones públicas a nivel internacional.
Afortunadamente para Ehrenburg, Stalin murió en marzo de 1953, y tanto él como la mayoría de los médicos judíos acusados fueron perdonados. Al año siguiente, él se atrevió a publicar "El deshielo", una obra alegórica sobre los abusos y la opresión del régimen de Stalin, y de nuevo sobrevivió.