AJN.- Por Roxana Levinson, corresponsal en Israel. El primer ministro Netanyahu aseguró este fin de semana que está dispuesto a dar por terminado este gobierno y adelantar las elecciones si el ministro de Hacienda, MosheKahlon, no cede en su decisión de hacer cumplir la ley – que aprobó este mismo gobierno – de formación de la nueva Corporación de Radiodifusión de Israel.
El jueves por la tarde parecía que la crisis debida a la creación de la nueva Corporación de Radiodifusión de Israel había sido superada. La noche anterior, el primer ministro Binyamin Netanyahu pidió públicamente al ministro de Hacienda, MosheKahlon, que de su conformidad para que el gobierno postergue o cancele la puesta en funcionamiento de la Corporación de Radiodifusión de Israel, que fue creada por el gobierno para reemplazar a la actual Autoridad de Radiodifusión.
El jueves por la tarde Netanyahu y Kahlon lograron un acuerdo por el cual, Netanayhu renunciaba a su idea de truncar la puesta en marcha de la Corporación de Radiodifusión – prevista para el 30 de abril próximo – y Khalon daba su apoyo a la ley con la que el primer ministro intenta ejercer un estricto control sobre los medios de comunicación. Netanyahu explicó que “le saltó el gen sefaradí”, una expresión por la cual más tarde se disculpó.
Pero este fin de semana, una vez más, la situación cambió. El titular de la coalición, legislador David Bitán, anunció – en una entrevista en Canal 2 – que el primer ministro “cambió de idea” y que el acuerdo al que había llegado con Kahlon ya no estaba vigente.
“No estamos dispuestos a que la Corporación comience a funcionar, todavía tenemos 45 días para lograr que no suceda”, afirmó Bitán, mientras la conductora del programa – la veterana periodista Rina Matzliaj repetía: “¿Otra vez?”.
Por el momento no está muy claro por qué y las especulaciones aumentan a medida que crece el escándalo. Lo cierto es que Netanyahu aseguró este fin de semana que está dispuesto a disolver el gobierno y adelantar las elecciones con tal de que la nueva Corporación – que su gobierno creó por ley – no se materialice.
El viernes, el primer ministro se reunió con representantes de los trabajadores de la Autoridad de Radiodifusión despedidos debido al cierre de la institución y la apertura de la Corporación, y el sábado con ministros del Likud. Netanyahu aseguró que la reunión con los trabajadores fue “desgarradora” y que no está dispuesto a que pierdan sus trabajos. Por primera vez en dos años, desde que la coalición aprobó la ley, Netanyahu se reunió con los trabajadores a los que hasta ahora no había recibido y consideró los despidos generados por la ley por la que se creó la Corporación.
En la oposición ya hay contactos entre el titular del Movimiento Sionista, ItzjakHertzog, y el ministro Kahlon, para aprovechar la ocasión y plantear una alternativa a este gobierno. Dentro del Likud, el ministro de Transporte, Israel Katz, aseguró esta mañana que la Corporación de Radiodifusión no es un motivo suficiente como para convocar elecciones. “¿Es que no hay límite?”, cuestionó el funcionario.
Mientras tanto, los trabajadores de Radio Kol Israel y todas sus emisoras , Canal 1 y el Canal Educativo de la televisión oficial, continúan en la incertidumbre, tanto quienes ya habían recibido la comunicación de que pasaban a formar parte de la Corporación de Radiodifusión e incluso firmado contratos, como aquellos que fueron despedidos y ya recibieron el comunicado oficial.