Itongadol.- Según altos funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, el próximo embajador estadounidense en Israel, David Friedman, podría trabajar desde una oficina en Jerusalem mientras la embajada permanece en Tel Aviv.
Friedman se basaría en el edificio del Consulado General de Estados Unidos en el barrio East Talpiot de la capital israelí con un reducido personal, mientras que la embajada frente al mar en Tel Aviv permanecería abierta, y la mayoría de las operaciones se ejecutarían desde allí. Según un informe de Canal 2 de Israel, Friedman ya posee tres apartamentos en el barrio Talbieh de Jerusalem.
El actual embajador estadounidense en Israel, Dan Shapiro, ha vivido en una residencia del gobierno de Estados Unidos en Herzliya, justo al norte de Tel Aviv.
El presidente electo Donald Trump planea que Friedman trabaje fuera de Jerusalem, como un cumplimiento de su promesa de campaña para mudar la embajada. El informe también señaló que -según un funcionario israelí- el yerno de Trump y su cercano asesor, Jared Kushner, fue uno de los que propuso trasladar al embajador a Jerusalem, no a la embajada.
Sin embargo, CNN reportó el martes que el equipo de transición de Trump informó a los aliados estadounidenses de que la embajada será finalmente trasladada, algo que dejó a los diplomáticos europeos preocupados.
Cuando fue elegido para el puesto de embajador el mes pasado, Friedman dijo: "Estoy profundamente honrado y humillado por la confianza depositada en mí por el presidente electo Trump para representar a Estados Unidos en Israel”. Además, añadió: “Tengo la intención de trabajar incansablemente para fortalecer el vínculo inquebrantable entre nuestros dos países y promover la causa de la paz en la región, y espero hacer esto desde la embajada de Estados Unidos en Jerusalem".
La semana pasada, el ex asesor de seguridad nacional israelí Yaakov Amidror dijo que la decisión de mudar la embajada era de Trump, no de Israel, "pero para nosotros es muy importante". Amidror continuó diciendo que se han "exagerado" las preocupaciones que se han expresado acerca de una posible reacción violenta de los árabes a una reubicación de la embajada.
Entre los palestinos, Amidror señaló: "Habría alguna reacción, pero será contenida. No es del interés de Abás tener manifestaciones que podrían salirse de control. Sabe que sólo puede sobrevivir gracias a la ayuda que recibe de Israel". Según él, tales protestas serían "muy insignificantes". Igualmente, "creemos que la reacción de extremistas en Medio Oriente no debería ser un factor en la decisión".