Itongadol/AJN.- Niños y jóvenes de todo Israel se disfrazan de Batman para la festividad judía de Purim, en homenaje a Ariel y Kfir Bibas, los pequeños asesinados por Hamás en la Franja de Gaza y cuyos cuerpos fueron devueltos a Israel a fines de febrero.

Desde esta tarde, los judíos de todo el mundo celebrarán Purim, una festividad de alegría, banquetes y disfraces que recuerda cuando la Providencia Divina y el compromiso de la reina Ester y su tío, Mordejái, impidieron la aniquilación de todo el pueblo en la Persia del 1356 A. E. C. (el año judío 3405).

Sin embargo, este año la festividad se verá opacada por el conflicto con Hamás, tras el ataque del 7 de octubre y el secuestro de centenares de personas, de las cuales 59 permanecen en cautiverio, no todas con vida.

Cuando los hermanos Bibas fueron secuestrados junto a su madre Shiri, también asesinada, se viralizaron fotos de los chititos disfrazados de Batman, persona del que Ariel, de 4 años, era fanático en particular.

En este Purim, muchos decidieron homenajearlo con esa vestimenta y también con globos naranjas, en referencia al cabello pelirrojo de los Bibas.

Las costumbres de Purim (suertes, plural de “pur”) incluyen la lectura en voz alta de la meguilá, un pergamino escrito a mano que relata la historia, al caer la noche y en la mañana siguiente, para que todos la escuchen y hagan ruido con matracas o lo que fuera hasta hacer inaudible el nombre de Hamán; entregar “Matanot laebionim” (regalos para los necesitados) a dos personas diferentes, que pueden ser algo comestible, o dinero para comprarlo, y una generosa caridad; enviar “Mishlóaj manot” (al menos dos alimentos) a amigos y familiares; y regocijarse en un banquete especial, cuyos participantes estén disfrazados.
