Itongadol.- El tercer buque de una flotilla petrolera iraní que transportaba combustible para Venezuela llegó a la zona económica exclusiva del país latinoamericano cuando los dos anteriores ya descargan en los puertos estatales de PDVSA, según datos de Refinitiv Eikon.
El buque cisterna con bandera de Irán Petunia cruzó el Mar Caribe el martes por la mañana, siguiendo la ruta tomada en los últimos días por los barcos Fortune y Forest.
“Quiero agradecer una vez más al pueblo de la República Islámica de Irán, al gobierno del presidente Rohani, al líder supremo Ayatollah Jomeini, nuestros queridos amigos, por su disponibilidad, solidaridad y valentía, que ha permitido que ya a Venezuela hayan llegado al día de hoy tres buques con la gasolina e insumos para la recuperación de las refinerías”, expresó este martes el presidente de la República, Nicolás Maduro, citado por la televisión estatal del país caribeño.
“Agradecer pues, a los trabajadores petroleros y Pdvsa, ya están llegando los insumos necesarios”, agregó, desde el Palacio de Miraflores, donde encabezó una jornada de trabajo con la Comisión Presidencial para el Control y Prevención de la Covid-19.
El Jefe de Estado adelantó que en los próximos días informará el plan especial para que la gasolina que está llegando por mar, sea distribuida de manera gradual y por fases en la etapa de lo que llamó la nueva normalidad, y en especial en el campo del abastecimiento seguro de combustibles al pueblo venezolano, consignó el citado medio.

Imagen: Televisión estatal de Venezuela.
El Fortune fue recibido el lunes en la refinería El Palito de PDVSA por el ministro de petróleo de Venezuela, Tareck El Aissami, quien agradeció a Irán por su apoyo durante la crisis, que ha obligado a los venezolanos a esperar en largas filas para obtener gasolina.
El acuerdo ha sido criticado por los Estados Unidos ya que ambos países miembros de la OPEP están bajo sanciones. Un funcionario estadounidense dijo a principios de este mes que la administración del presidente Donald Trump estaba considerando respuestas al envío, lo que provocó que el gobierno iraní advirtiera a Washington contra cualquier acción militar.