Itongadol.- Keith Siegel, Yarden Bibas y Ofer Calderon regresaron esta mañana a Israel después de 484 días en cautiverio en Gaza en manos de Hamás. Este sábado la televisión estatal israelí dio a conocer las condiciones en las que estuvieron retenidos los tres con escasez de alimentos y traslados.
Keith Siegel estuvo retenido por integrantes de Hamás en la ciudad de Gaza y permaneció junto a otros secuestrados.
Estuvo en túneles, pero fue trasladado a departamentos, cuando, según contó, lo encerraron en cuartos internos ocultos para que, en la medida que alguien ingrese no pueda encontrarlo.
Respecto a la alimentación, contó Keith que hubo escasez de comida. Volvió hambriento y solo había comido el día anterior a su liberación al mediodía.
A pesar de ser vegetariano, los captores le dieron carne y debió comerla para sobrevivir. Durante largos meses, Keith no supo qué pasó con su hijo que estuvo con él en Kfar Aza el 7 de octubre. Tras escuchar su voz en la radio, entendió que estaba con vida.
Ofer y Yarden estuvieron juntos en los primeros días de cautiverio. Contaron en las primeras semanas los integrantes de Hamás los golpearon, los encerraron en celdas con rejas y los maltrataron, tanto física como psicológicamente. Durante los largos días en cautiverio, ambos fueron trasladados tanto bajo tierra como en edificios, junto a otros secuestrados.
Los captores trataron a Ofer como un soldado reservista, y por esto fue liberado esta mañana con uniforme tipo de las FDI. Al ser recibido por las tropas israelíes les pidió una cerveza, pero debido a que estaba débil, se le explicó que más adelante la recibiría.
Yarden fue trasladado en varios sitios en Jan Yunis y permaneció en un edificio escondido y en túneles.
Yarden sufrió abuso psicológico, siendo que los captores le hablaron todo el tiempo de su esposa Shiri y sus hijos Kfir y Ariel.
Durante su estadía en cautiverio se aferró a la esperanza y aprendió árabe.
Keith, Ofer y Yarden relataron que tuvieron acceso a la prensa y vieron las manifestaciones en Israel pidiendo su liberación, lo que les dio fuerza y esperanzas.