Itongadol.- En el marco del 4° Encuentro Internacional de Educación Judía, Itongadol conversó con Gael Grunewald, vicepresidente y titular del Departamento de Educación de la Organización Sionista Mundial.
– ¿Cómo ve la educación?
– La educación es realmente, al principio y al final, lo más importante. ¿Por qué es lo más importante? Porque conecta con las raíces, conecta con lo importante, y con eso se puede construir el futuro. También vive el presente y vive el futuro. La forma en que le hablo a mi hijo, la forma en que educo a mi hija también está construyendo su futuro. Ahora, el Departamento de Educación envía docentes-emisarios (morim-shlijim) a todo el mundo, incluso a la Argentina.
– ¿Formales o informales?
– Formales, para las escuelas… Y estamos haciendo todo lo posible para que estos shlijim lleven el Estado de Israel a la escuela, lleven los nuevos métodos de Israel, enseñen hebreo, enseñen judaísmo, enseñen todas estas cosas para conectarse con la juventud de aquí, de la Argentina. Esto es lo más importante…
– ¿Esto está sucediendo ahora?
– Ahora tengo shlijim en la escuela Natan Gesang y en La Casa. Si D’s quiere, viene otra pareja para la escuela Beth. Tenemos dos en Chile y dos en Uruguay. Tenemos en Brasil, tanto en Rio (de Janeiro) como en San Pablo. Realmente espero que en la Argentina podamos aumentar la cantidad de shlijim. Hay muchas escuelas que quieren docentes-shlijim. Estos docentes-shlijim no solo enseñan en la escuela, sino que en su tiempo libre -a la noche, a la tarde, en Shabat, el domingo- también pueden ser muy, muy activos en un movimiento juvenil, en una sinagoga, donde sea… porque aquí muchas veces las escuelas están conectadas con una comunidad y, por lo tanto, pueden hacer la conexión… Esto significa que, en realidad, ganás mucho con un shliaj porque enseña en la escuela y también se conecta con los padres. Pondré un ejemplo: el viernes por la mañana estuve en Beth. ¡Realmente a la mañana! Hay una reunión de los padres con los alumnos y allí habla el shliaj. Ahora, aparte de eso, se encuentra con ellos más tarde, en Shabat, se encuentra con ellos el domingo, también en la escuela, también en la comunidad y también en el movimiento juvenil.
– Le pregunté cómo ve la educación: ¿qué cree que debería hacerse muy rápidamente?
– Está el tema del hebreo porque el hebreo es un idioma que te conecta con el Estado de Israel. Lo segundo es la conexión con Israel. Soy un gran seguidor de la historia judía… Creo que cuanto más aprendan los niños la historia judía obtendrán una imagen mucho más amplia de lo que significa ser judío: qué es el Primer Templo, qué es el Segundo Templo, qué es la Shoá, qué son todos esos procesos… para entender que hay aquí toda una historia del pueblo. Ahora, solo podés explicarles esto a los niños si les enseñás historia…
– ¿Son conscientes de que están haciendo algo muy importante?
– Esto realmente es una de las cosas más importantes… El Estado de Israel paga parte del salario de los docentes-shlijim que mandamos porque para el Estado de Israel es muy importante enviar docentes-shlijim al exterior. Es muy difícil ser judío… La asimilación es un problema muy difícil y por eso dedico tantos años de mi vida a la continuidad judía. Con Gaby (Glazman) queríamos docentes-shlijim tanto en Bialik como en Ioná. Lo intentamos todo el tiempo… Ahora, también tenemos problemas para encontrar shlijim apropiados, para encontrar israelíes que estén dispuestos a viajar a la Argentina por 2, 3, 4 años… Todo esto es difícil, pero trabajamos muy duro en ello…
– ¿Qué vio hoy y qué cree que pasará con el trabajo que hacen?
– Necesitamos encontrar una solución para aquellos que no estudian en escuelas judías. Hay países que tienen un marco educativo para quienes no van a una escuela judía por cualquier razón: el domingo, dos veces por semana… Hay que hacer algo por esos niños. Es importante… Segunda cosa: tenemos que subir, elevar el estatus del docente. El estatus del docente no es lo suficientemente alto… Un maestro debe ser suficientemente respetado… No tiene que ser que el pobre idiota de la clase va a ser docente… Pero para eso hay que poner dinero para que valga la pena, para tener un sueldo… Y otra cosa: así como un médico está constantemente estudiando para ser mejor -hay nuevos medicamentos, hay nuevos métodos…-, se debe hacer lo mismo…
Más de 1.400 docentes participaron en el encuentro, coorganizado por el Vaad Hajinuj de la AMIA, los departamentos de Emprendimientos Sionistas, Educación, y Hebreo y Cultura Judía de la OSM y United, un proyecto del Estado de Israel para favorecer la educación judía en la Diáspora.
Bajo el lema “Creando espacios de oportunidad en un mundo cambiante”, las jornadas se desarrollaron el 19 y 20 de julio en el colegio Martin Buber, con un programa que incluyó a 36 prestigiosos disertantes, de los cuales 11 expositores viajaron especialmente desde Israel.
El acto de apertura tuvo, entre sus principales oradores, a Jaime Perczyk, ministro de Educación de la Nación, y Amos Linetzky, presidente de la AMIA.