Itongadol.- Con el aumento en el número de niños que se enferman de coronavirus, el Hospital Hadassah Ein Kerem abrió la primera Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP) COVID-19 de Israel.
Según se informó al 22 de enero, había cuatro pacientes muy jóvenes en la UCIP a causa del brote de COVID-19. El pequeño tiene apenas un par de semanas. Afortunadamente, el bebé está estable mientras que los otros pacientes están en estado grave.
«Se tuvo que abrir una UCI COVID-19 para bebés y niños para quienes necesitan respiración y cuidados intensivos y dotarla de un equipo de especialistas en cuidados intensivos pediátricos y anestesia que pudieran cuidar a estos bebés y niños enfermos. Tres de los niños usan ventiladores porque tienen problemas pulmonares graves», relató la jefa de enfermería Sonya Sharabi.
Los miembros del personal de la UCIP están divididos por prioridades en competencia, relató Sharabi. Necesitan mantener su profesionalismo al más alto nivel, siguiendo cada respiración de cada niño, mientras siguen haciendo lo que pueden para apoyar a las familias. “Recién salí de un chat de video con la familia de uno de los bebés”, relató. “Sus seis hermanos observaron al bebé y dijeron lo lindo y dulce que es su hermano. Fue desgarrador», contó.
Por su parte, Jorge Diener, director Asociado de Hadassah International, comentó que «se estima que va a haber una mutación israelí porque justamente el virus en un lugar que está perdiendo la batalla tiene que buscar la alternativa para ganarla y seguramente va a tener que mutar en Israel».
Consultado por Itón Gadol si el éxito de la campaña de vacunación de Israel, reconocido a nivel internacional, se veía empañado por el número de contagio, el representante de Hadassah lo desestimó. «La vacunación sigue siendo un éxito y nos va a llevar a la salida exitosa del COVID, salvo que haya una sorpresa y surja una mutación que sea muy poderosa y que lo hecho con esta vacuna no sirva para nada», explicó.
«Cerrar el aeropuerto (Ben Gurion) no habla de un fracaso de la vacunación. Todavía nosotros no vemos el efecto de la inmunidad causado por la vacuna porque no todos recibieron la segunda dosis de la vacuna. Todavía no hay una inmunidad en toda la comunidad», agregó.
Según apunto Diener, la vacuna de Pfizer, suministrada en Israel, tiene un mecanismo que puede responder a distintos tipos de mutaciones.
No obstante aclaró que existe preocupación porque «la gente joven se contagia más rápido» con las nuevas mutaciones. Por eso, el gobierno israelí se decidió vacunar a los estudiantes secundarios que tienen que hacer las pruebas de fin de curso.
Diener comentó que información científica indica que la mutación británica «cambió la estrategia frente a la pandemia, ya que modifica la agresividad del contagio». «Los chicos se suponía que se contagiaban pero no se enfermaban. Se lo pasaban uno a otro. Hoy en día los chicos y la embarazadas que se están contagiando es muy preocupante», concluyó.