Para manifestar la solidaridad incondicional con Israel tras los sanguinarios ataques perpetrados por el grupo terrorista Hamas, una multitud se congregó, el lunes 9 de octubre, frente a la sede de Hacoaj, en el barrio de Almagro, en el marco de la convocatoria conjunta que realizaron las instituciones AMIA, DAIA y OSA.
Con los discursos de los presidentes de las tres entidades organizadoras de la marcha, Amos Linetzky, Jorge Knoblovits, y Demián Stratievsky, la manifestación contó con un mensaje de agradecimiento del Embajador de Israel en la Argentina, Eyal Sela, quien destacó las expresiones de solidaridad recibidas, ante los demenciales ataques sufridos en su país.
Con la conducción del director ejecutivo de DAIA, Víctor Garelik, el masivo encuentro contó también con la participación del rabino de la Comunidad Bet Hilel, Ioni Shalom, y del rabino de AMIA, Eliahu Hamra, quien tuvo a su cargo el recitado de una oración por la memoria de las personas asesinadas y la elevación de sus almas.
A la hora de compartir su mensaje, el presidente de AMIA calificó como “inadmisible” el nivel de odio desplegado por Hamas. “Pero no sólo en estos días debimos enfrentarnos a la cara más nefasta del terrorismo y su proceder asesino, sino que -atónitos- debimos escuchar en nuestro propio país a extremistas que no solo no condenan al terrorismo, sino que intentan esgrimir alguna justificación”, advirtió.
“Hemos escuchado por ejemplo con desagrado como en el debate presidencial la candidata Myriam Bregman ha intentado justificar el accionar de las bestias, utilizando el dolor causado estos días con fines electorales demagógicos. Son impresentables y canallas, disfrazados de un falso progresismo, muestran su odio más profundo”, enfatizó Linetzky.
“¿Cómo permanecer callado o justificar la barbarie? ¿Quiénes pueden no ser sensibles al escenario de terror que sembraron los asesinos? ¿Quiénes puedes quedarse callados ante los centenares de civiles masacrados? ¿Quiénes pueden defender a un grupo terroristas que ultraja mujeres? ¿Qué quema casas con gente adentro? ¿Quiénes pueden justificar la exhibición de cadáveres como trofeos?”, se preguntó el presidente de AMIA ante la multitud que se dio cita para repudiar el accionar terrorista.
“Cuando se trata del respeto por la vida, no hay espacio para la duda o la especulación. Ante el terrorismo no hay silencio o neutralidad que se justifique”.
En palabras del presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits “no deberíamos sorprendernos” la crueldad sin límites desplegada por Hamas. “La carta fundacional de esa organización declara sin tapujos que su razón de ser, su propósito excluyente, es la destrucción total y absoluta no sólo del Estado de Israel sino de todos nosotros, de todos los judíos, en cualquier parte del mundo”.
“Y claro que no están solos, hasta que comiencen los ataques para que otros países, organizaciones y partidos se sumen con regocijo a esta locura de terror”, sostuvo al momento de pronunciar su mensaje ante la multitud presente.
“Algunos con armas y fuerzas de combate, con abultados financiamientos o recursos tecnológicos como la República de Irán; otros con apoyos ideológicos y declaraciones explícitas a favor de la masacre. Por izquierda y por derecha, leemos y escuchamos una y otra vez declaraciones que erizan la piel”, remarcó.
“Hay que defenderse contra el terrorismo, el mismo terrorismo que arrancó la vida de cientos de argentinos en la AMIA en 1994 y en la Embajada de Israel en 1992. Como seres humanos, lloramos a nuestros muertos, cuidamos a los heridos, contenemos a las familias. Pero también nos defendemos”, aseguró, a su turno Demián Stratievsky.
“Hamas ataca. ¿Saben por qué? Algunos lo llaman partido político. Yo los llamo asesinos. Buscan destruir, atacan la democracia, a las mujeres que oprimen, al progreso, al pueblo palestino, atacan al bienestar, la innovación, atacan porque son terroristas”, concluyó el presidente de la Organización Sionista Argentina.
Al finalizar el acto, la multitud reunida protagonizó uno de los momentos más emotivos del acto, cuando entonó los himnos de Argentina y de Israel, mientras flameaban las banderas en lo alto, y las luces de los celulares iluminaban el lugar que reunió a miles de personas para repudiar la barbarie terrorista de Hamas.