Itongadol.- AJN.- El Museo del Holocausto de la ciudad de Buenos Aires recibió como depositario judicial 83 objetos nazis, 71 de ellos únicos, en el marco de la causa caratulada como “Olivares, Carlos Alberto sobre infracción de la ley 25.743”.
El acto se llevó a cabo ayer a la tarde en el edificio del Museo, que se está remodelando, y participaron la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich; la jueza a cargo de la causa, Sandra Arroyo Salgado; y el jefe de la Policía Federal Argentina, Néstor Roncaglia.
Durante su discurso, el presidente del Museo, Marcelo Midlin, expresó: “Esos objetos despreciables provienen de una ideología que produjo tortura y muerte. Son la muestra de un régimen de odio y discriminación que acabó con la vida de once millones de personas (incluidos un millón y medio de niños), y arrastró al mundo al peor momento de su historia”.
“Estos objetos, que fueron usados en el pasado para fomentar el odio, la muerte y la destrucción, estarán ahora al servicio de la transmisión de valores democráticos, la educación y la lucha por la memoria, para que tragedias, como la del Holocausto, no se vuelvan a repetir”, agregó Midlin.
Por su parte, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, manifestó: “No hicimos más que cumplir con nuestro deber, a raíz de la denuncia que recibimos de la Policía Federal Argentina. Es importante que estos elementos formen parte de este Museo, que los conservará en su condición de depositario judicial y es el lugar donde deben estar, por lo menos hasta que esta investigación judicial concluya y lo resuelvan los jueces superiores a la instancia en la que a mí me toca intervenir”.
Asimismo, el jefe de la Policía Federal Argentina, Néstor Roncaglia, explicó cómo miembros de la fuerza a su cargo investigaron la pertinente denuncia, dando detalles del allanamiento que dio como resultado el secuestro de los objetos, cuya originalidad fue atestiguada por peritos que llegaron especialmente de Alemania.
Finalmente, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, luego de manifestar que los objetos forman parte de una ideología que llevó a cabo la Shoá, asesinando a millones de seres humanos “por el sólo hecho de ser judíos”, propuso que en el Museo “haya un lugar para la historia de que pasó en la Argentina con los nazis que vinieron: cómo entraron, cómo vivieron, quién los protegieron, por qué Argentina, distinto a otros países como Brasil, tomó una decisión equivocada en ese momento, cuando declaró la guerra, la guerra ya había terminado y fue un hecho de oportunismo”, recordando que Churchill afirmó en su momento: “Los argentinos no solamente están equivocados, sino que estuvieron del lado incorrecto de la historia y de la humanidad”.
Al referirse específicamente a los objetos entregados en custodia judicial al Museo, la ministra afirmó: “Creo que estas cosas que hoy vemos acá no son una casualidad: no hay alguien que las vende porque sí, sino porque hay una cadena histórica en la Argentina de gente o intenciones que ha generado una reivindicación de ese momento histórico”.
Además, manifestó también que la exposición de los objetos no solo implica “la idea de la materialidad de los objetos, sino la simbología, lo que significa que la Argentina es un país de libertad, de democracia, un país abierto donde no se persigue a las personas por lo que piensan, un país que no rompa y destruya, en Rosh Hashaná, el cementerio de La Tablada, sino que sea capaz de convivir”.
En el acto participaron también sobrevivientes de la Shoá, miembros de la Comisión Directiva del Museo, el jefe del Departamento de Protección del Patrimonio Cultural de la Policía Federal Argentina, Marcelo El Haibe, y demás miembros de la fuerza de seguridad.
Por último, Marcelo Midlin informó que el domingo 1° de diciembre, el nuevo Museo del Holocausto de Buenos Aires abrirá sus puertas, con el edificio remodelado y una nueva exhibición permanente.