Las últimas acciones de los grupos armados han puesto al descubierto la anarquía que reina en los territorios palestinos y ha hecho aflorar las protestas de grupos reformistas que exigen poner fin a la corrupción.
A éstas se ha sumado el primer ministro palestinos que, ante la situación de ‘caos’ en los territorios palestinos, ha decidido presentar su dimisión al ‘rais’. Arafat le ha pedido que retire su renuncia con la promesa de que impulsará una profunda reforma de los servicios de seguridad, según ha informado un responsable cercano a Abu Alá.
El presidente de la Autoridad Palestina ha anunciado casi de inmediato que reducirá de ocho a tres el número de servicios de seguridad, una medida reclamada desde hace tiempo por el Gobierno palestino y la comunidad internacional. El plan incluye la consolidación de todos los organismos de seguridad en tres cuerpos bajo el mando de un ministro del Interior con plenos poderes.
Arafat ha tratado de zanjar con contundentes medidas la grave crisis abierta por la oleada de secuestros perpetrados ayer en Gaza. Los autores, Las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, justifican sus acciones como protesta por la corrupción en la Autoridad Nacional Palestina y ‘el rais’, respondiendo a sus demandas, ha decidido destituir a uno de los acusados, el general Ghazi Jabali, sólo unas horas después de ser liberado.
El jefe de la policía palestina, que estuvo secuestrado durante cuatro horas, fue reemplazado por el general Saeb el Ajez, según anunció éste último. Durante la misma jornada, fueron retenidos el coronel palestino Jaled Abu al Ula por subordinados despedidos que exigían volver a sus puestos y cinco cooperantes franceses. Éstos últimos fueron tomados como rehenes en la sede de la Media Luna Roja en la ciudad de Jan Yunes por las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa.
El Consejo de la Autoridad Nacional Palestina ha declarado el estado de emergencia en Gaza para restaurar la calma y el control en vista del deterioro de la seguridad e Israel, como medida de precaución, ha prohibido el acceso a sus ciudadanos a la franja.
Fte El Mundo