La misma mujer que acusó en un principio a Katsav de violación ha presentado nuevas acusaciones contra él, unos cargos por los que el presidente israelí fue interrogado durante más de dos horas por la Policía la semana pasada.
En enero, Mazuz anunció su intención de acusar formalmente al presidente con los cargos de violación, agresión sexual y fraude en base a las acusaciones presentadas por cuatro mujeres que trabajaban para él.
Debido a su cargo, Katsav tendrá una última oportunidad para declarar antes de que Mazuz formalice la acusación el próximo 2 de mayo.
Katsav, por su parte, afirma que no ha cometido ningún delito y rechaza dimitir. Su mandato de siete años concluye este mismo año.