Itongadol.- La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) salió hoy al cruce de las recientes declaraciones del presidente argentino, Alberto Fernández, y recomendó «evitar comparaciones que banalizan» la tragedia del Holocausto para justificar desacuerdos dentro del sistema democrático.
La DAIA respondió así a las declaraciones del presidente Fernández quien condenó una protesta realizada contra un juez de la Corte Suprema de Justicia y acusó a sectores de la oposición política al gobierno nacional de apelar a métodos que son “propio del fascismo y del nazismo”.
«Ante las expresiones del Presidente Alberto Fernández sobre las presiones ejercidas en el domicilio del Juez Ricardo Lorenzetti, Ministro de la Corte Suprema de Justicia, considerando esa acción ‘propia del fascismo y del nazismo’, la DAIA reitera que todos debemos evitar comparaciones que banalizan la tragedia de la Shoá, utilizándolas para expresar desacuerdos dentro del sistema democrático», transmitió la DAIA.
De esta manera, la representación política de la comunidad judía argentina fijó su posición ante las declaraciones de Alberto Fernández, quien al referirse a la protesta contra Lorenzetti dijo: «Eso no es un reclamo popular, es el más vil de los escraches, propio del fascismo y del nazismo. No tiene nada que ver con la democracia”, dijo el mandatario para repudiar la protesta que este fin de semana se llevó a cabo frente a la casa del juez de la Corte Ricardo Lorenzetti en la ciudad de Rafaela, en Santa Fe.
El jefe del Estado dijo que un “grupo de ciudadanos opositores al Gobierno” se manifestaron en la casa del ministro del máximo tribunal. “Fueron básicamente a presionar un juez a la hora que tiene que tomar una decisión”, aseguró. La referencia tiene que ver con la acordada que el máximo tribunal de Justicia debe resolver en las próximas horas y que tiene que ver con el futuro de tres jueces que fueron nominados por el gobierno anterior y cuyos dirigentes se encuentran en la oposición.
“Los reclamos que se hacen, del modo que se hacen, no son reclamos sino que dejan en evidencia la peor muestra de intolerancia y respeto a la democracia que le costó 30.000 vidas a la Argentina”, subrayó Fernández. “No vamos a negociarla, vamos a cuidarla”, advirtió el presidente.
“Me solidarizo con Lorenzetti, con Sergio, con Cristina, que lo vive en su casa permanentemente. Llamo a la reflexión a quienes promueven esas cosas”, sostuvo Fernández en referencia a las situaciones similares vividas por el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa, y de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.