Itongadol/AJN.- El chef israelí Shahar Lubin, que se ganó su reconocimiento culinario en Israel y más tarde en Estados Unidos, cocinó en más de 20 restaurantes y comenzó su carrera a los 16 años. Sin embargo, su gran éxito llegó cuando se mudó a Vietnam y abrió su propio restaurante.
“Dije: ‘He estado haciendo esto por otros por tanto tiempo que podría hacerlo por mí mismo’”, expresó. Ahora es dueño de Daluva, el primer y único pub gastronómico de Medio Oriente en Hanoi, una ciudad de siete millones de personas y una cultura de comidas urbanas.
Lubin, de 37 años, creció en el pueblo israelí Haratit, Galilea, y pasaba sus veranos trabajando como pastor. Él expresó que comenzó a cocinar como una actividad social con jóvenes de pueblos vecinos. En el 2000, tras servir en el ejército israelí y vivir en Jerusalem, él se mudó a Filadelfia, Estados Unidos, y comenzó a trabajar en la cocina, de cocinero a chef jefe.
En Hanoi, él se encontró con los dueños de un grupo de restaurantes vietnameses que estaban planeando abrir un negocio mexicano. Ofrecieron llevarlo a él como consultor pero el negocio no se materializó. Sin embargo, Lubin se quedó en la ciudad, donde trabajó de consultor de restaurantes, profesor de inglés y escritor independiente. En el 2012 tomó control de un restaurante.
El dueño previo de Daluva había creado un menó asiático y occidental. Entonces él lo renovó y relanzó en el 2013. El menú ahora incluye algunos favoritos de los israelíes, como humus, falafel y shakshuka, junto con hamburguesas americanas y costillas de cerdo. Lubin cocina a propósito una gran variedad de estilos y los usa para defenderse cuando dicen que su cocina es “étnica”.
“Trato de divorciar la comida de su origen y pensar ‘¿cuál es el sabor?’, no ‘¿de dónde viene?’”, expresó.
