Los cuatro, militantes del Frente Popular para la Liberación de Palestina, ya fueron condenados el pasado jueves por un tribunal palestino a penas de entre uno y 18 años de prisión, aunque Estados Unidos sugirió que deberían ser juzgados de nuevo.
Sin embargo, Rabo precisó que el acuerdo de entrega no afecta a otros dos activistas recluidos en Ramala y que Israel reclama, el jefe del FPLP, Ahmed Saadat, y el responsable de finanzas de la ANP, Fuad Shubaki, acusado de organizar la operación de contrabando de armas descubierta por Israel a bordo del barco «Karine A».
«Shubaki y Saadat no están implicados en el asesinato de Zeevi, pertenecen a la dirección palestina y no tienen por qué ser encarcelados», dijo Abed Rabo.
Los seis han estado recluidos junto al presidente palestino, Yasir Arafat, desde fines de marzo, en la Mukata de Ramala, y durante este tiempo Israel ha asegurado que no pensaba levantar el asedio hasta la entrega de estos seis activistas.
Aparentemente, el problema fue resuelto el pasado domingo, cuando palestinos e israelíes aceptaron que efectivos de EEUU y Gran Bretaña -que serán diplomáticos y no militares- custodiaran a los activistas en una cárcel en Jericó, aunque las divergencias entre si son cuatro o seis los concernidos podría echar al traste el acuerdo.