Itongadol.- En febrero de 2010 la prensa internacional fue tomada por sorpresa: la policía de Dubai publicó fotografías y videos tomados por las cámaras de seguridad con agentes extranjeros que habían sido enviados para asesinar a Mahmoud al-Mabhouh de Hamas. Los videos mostraron cómo 11 extranjeros entraron al hotel en Dubai donde se hospedaba Mabhouh y, llevando disfraces diferentes, hicieron su operativo y huyeron del lugar inmediatamente después del crimen. El Mossad, por supuesto, era el principal sospechoso.
A la mañana siguiente, el director franco-israelí y guionista Emmanuel Nakache estaba sentado en un café de Tel Aviv con la lectura de los informes en los periódicos. Estaba profundamente impresionado por la forma en que la tecnología había hecho posible seguir la secuencia de la operación, segundo a segundo. Mientras que el Mossad nunca confirmó que estaba detrás de la operación, eso no impidió que Nakache, como millones de otros, fantaseara acerca de la identidad de los asesinos y cómo se había llevado a cabo su misión.
"Fue fascinante para mí pensar si el Mossad fue responsable de la operación o no, y verlos atrapados in fraganti por las cámaras de seguridad", relató Nakache. "Además, en base a las fotos, parecía como si hubieran usado pelucas, pegado el mismo bigote y usado las mismas gafas. Se veían exactamente como una comedia de Louis de Funes", añadió en referencia al fallecido actor cómico francés.
Nakache en ese momento sólo había hecho un largometraje, "Síndrome de Jerusalem", una imagen de bajo presupuesto que dirigió con su amigo Stephane Belaisch. Nakache, que nunca estudió cine, había empezado a trabajar a una edad relativamente avanzada y era prácticamente desconocido en la industria local. Sin embargo, no sólo escribió una comedia criminal sofisticada y logró entusiasmar a los inversores, levantando una enorme suma de dinero para los estándares israelíes (unos 10 millones de NIS, dos veces y medio del presupuesto de una película israelí promedio). También fue capaz de montar un impresionante elenco de estrellas israelíes y francesas y, entre ellas, atrapar nada menos que a la supermodelo Bar Refaeli para el papel del agente secreto femenino.
La película resultante, "Kidon" ("lanza" – el nombre del departamento del Mossad presuntamente encargado de asesinar a los terroristas) se inauguró ayer en los cines israelíes. Fue producida por Michael Sharfstein, Moshe Edery, Leon Edery y Manuel Mintz, con el apoyo de la Fundación Rabinowitz y Canal 10.
El año pasado, "Kidon", a sólo unos pocos días de que comenzara el rodaje, tuvo un inesperado inconveniente. Al enterarse de que en una de las escenas del personaje Mabhouh, se lo veía en el consumo de alcohol y sometido a la tentadora israelí (Refaeli), la familia afirmó que mandaría a bloquear la distribución de la película por motivos que comprometían gravemente la reputación del hombre de Hamas.
El director admitió haber tenido a Refaeli en mente para el papel de la agente seductora cuando estaba escribiendo el guión. "Cuando entendió que en esta película no era únicamente una mujer tentadora, ya que hay un giro en la trama, ella aceptó de inmediato", recordó. "Por un lado, estoy seguro de que ella estaba nerviosa porque aparece al lado de grandes actores como Sasson Gabai, pero por otro lado, estoy seguro de que ellos también estaban nerviosos y preocupados de que serían recordados sólo como “actores que jugaron con Bar Refaeli en esta película", comentó entre risas.