Itongadol/AJN.- Irán rechazó hoy lunes la acusación del fiscal federal Alberto Nisman, quien en un dictamen de más de 500 fojas denunció al régimen islámico de infiltrarse en varios países de Sudamérica para instalar estaciones de inteligencia destinadas a cometer, fomentar y patrocinar actos terroristas, en consonancia con sus postulados de exportación de la revolución.
Una fuente de la Oficina de Diplomacia Pública de la Cancillería iraní le restó importancia a la acusación del fiscal de la causa AMIA, a quien calificó de “sionista” para relativizar la denuncia.
“Nosotros no concedemos la menor importancia a los reclamos del fiscal sionista”, respondió la fuente diplomática.
En un dictamen difundido la semana pasada, Nisman acusó a Irán de infiltrar al terrorismo en al región.
Para arribar a este dictamen, Nisman acudió a una innumerable cantidad de informes, diligencias probatorias, actuaciones en la Argentina, en la región, en Europa y Estados Unidos y a sentencias judiciales emanadas de los Tribunales de dichos países, donde prueba la identidad que se verifica en los mecanismos de toma de decisión y ejecución de atentados terroristas ocurridos en distintos países y atribuidos por sentencias firmes a agentes de inteligencia iraníes.
En un hecho que no registra precedentes, se demuestra judicialmente los distintos pasos llevados adelante para lograr esa infiltración.
En su presentación, Nisman detalló cómo opera, cómo se organiza, cuál es el entramado y cómo se oculta el terrorismo fundamentalista iraní, que ya produjo resultados devastadores en la Argentina y que estuvo a punto de producirlos hace unos años en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York, donde se desbarató un intento de atentado por parte de agentes de inteligencia iraníes residentes en Guyana y Estados Unidos.
El fiscal sostuvo que existen fuertes y concordantes indicios de la infiltración e instalación de estaciones de inteligencia de Irán en países como Brasil, Paraguay, Uruguay, Chile, Colombia, Guyana, Trinidad y Tobago y Surinam.
La resolución del fiscal fue conocida en momentos en que la Argentina e Irán firmaron un memorándum de entendimiento que le permitiría a la justicia argentina interrogar a los ciudadanos iraníes acusados de haber participado en el atentado a la AMIA, ocurrido en julio de 1994
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