La presidenta brasileña Dilma Roussef (en la foto enciende una vela en memoria de los asesinados en la Shoá) participó ayer, domingo, de una ceremonia de homenaje en el marco del Día Internacional de Conmemoración de las Víctimas del Holocausto realizada en el Fórum Ruy Barbosa de Salvador, organizada por la Confederación Israelita de Brasil y la Sociedad Israelita de Bahía.
En su discurso, que cerró el acto, la mandataria aseguró que la Shoá “siempre servirá de paradigma contra la intolerancia” y destacó el coraje y la esperanza de quienes lucharon contra la política de exterminio nazi.
“Cada vez que se trate de destruir la dignidad humana o de cambiar la conciencia con métodos como éste se está haciendo una política de exterminio, y por desgracia, todavía sucede en el mundo”, agregó.
“Lamentamos todas las víctimas del exterminio, que en este momento padecen la misma política inhumana y descalificadora de las personas practicada por los nazis”, prosiguió Roussef.
Por otra parte, la Presidenta recordó que “Brasil fue el primero en apoyar la creación del Estado israelita” y calificó de “increíble que después de tanto tiempo aún no haya paz en Medio Oriente”.
“El gobierno brasileño cree que para eso será imprescindible la creación de un Estado palestino democrático”, finalizó Roussef.
Previamente, dirigentes comunitarios y el gobernador de Bahía, Jaques Wagner, se refirieron a la Shoá y su significado en la actualidad.
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