Al culminar ayer, domingo, la licencia que oportunamente solicitara, Guillermo Borger (foto) reasumió la presidencia de la AMIA.
El líder comunitario llegó hoy, lunes, a media mañana a su despacho e inmediatamente se reunió con directivos de la entidad.
“Estamos retomando la agenda institucional para seguir ejecutando el accionar diario (de la institución), cada vez con más fuerza, si bien entendemos que estamos en una transición hasta que en cualquier momento se defina la próxima Comisión Directiva, que es una deuda que tenemos con toda la comunidad”, declaró a la Agencia Judía de Noticias (AJN) en su primer día en Pasteur 633.
Cabe recordar que el próximo lunes 7 de noviembre volverá a reunirse la Asamblea Electora, tras las elecciones de abril pasado, a fin de designar a las nuevas autoridades, que tendrían que haber asumido el 31 de mayo.
En diálogo con AJN, Borger se manifestó “doblemente entusiasmado para seguir con plena gestión y entregar una AMIA fuerte y fortalecida” a sus sucesores.
En rigor y pese a su licencia, el dirigente comunitario nunca se alejó del acontecer diario de la AMIA, tal como pudo verse en la cena anual a beneficio de la Red de Empleo o ayer mismo, cuando, junto con el embajador de Israel, Daniel Gazit, ocupó la cabecera de la mesa en el tradicional asado casher que realiza todos los años la Asociación Filantrópica Israelita (AFI) en el hogar “Barón Hirsch”, en el partido bonaerense de San Miguel.
Del mismo participaron casi un millar de personas, entre internados, sus familiares y amigos y dirigentes de diversas instituciones judías.
Borger explicó a AJN que se trató de una actividad “muy importante porque es una centenaria institución que hace el bien por y para la gente”.
“Es meritorio porque le dan vida a nuestros abuelos, de la misma manera que la AMIA es sensible y hace lo suyo para la tercera edad”, parangonó.
“La AMIA se siente absolutamente identificada con ese accionar, y por eso nuestra participación, al igual que en años anteriores” en el evento de la AFI.
La reasunción de la presidencia de la AMIA por parte de Borger desvirtúa las versiones que indicaban que prolongaría su licencia más allá del 30 de octubre.
388