El presidente de la DAIA, Aldo Donzis, aseguró hoy que las inscripciones antisemitas que se encontraron tras el ataque al Cementerio Israelita de la ciudad capital de la provincia de San Luis, donde fueron profanadas 27 sepulturas, refieren a “la peor época nazi”.
“Tengo que expresa mi más enérgico repudio a un nuevo acto de profanación de una enorme magnitud, dado que las inscripciones que se vieron en el cementerio y las 27 tumbas profanadas, se refiere a la peor época nazi”, afirmó Donzis en declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
Además, el titular de la representación política de la comunidad judía argentina se quejó por “las reiteradas oportunidades” en que se viene dando este tipo de hecho “con total impunidad”.
En lo que va de diciembre, la comunidad judía argentina sufrió al menos la profanación de dos cementerios, ya que al ataque de San Luis se agrega el atentado al cementerio judío de Liniers, ocurrido entre la tarde del domingo 7 de diciembre y la madrugada del 8 de diciembre.
“Hoy hemos hablado con la presidenta de la DAIA de San Luis, (Saada Bentolillas), que estaba en el cementerio con el ministro de Gobierno de esa provincia y el jefe de la policía para hacer las actuaciones correspondientes a la denuncia policial y judicial”, comentó el titular de la DAIA.
Donzis indicó que se tomaron las medidas para que “inicien rápidamente la investigación y esperamos que en esta oportunidad se sepa quienes fueron los responsables para que no sigan sucediendo estos hechos”.
Respecto del alcance de este ataque, el titular de la DAIA sostuvo que “cualquier profanación a un lugar sagrado es grave, pero la dimensión, hay que imaginarse el tamaño de un cementerio como el de San Luis, donde profanar 27 tumbas es una escala enorme”.
“Estamos preocupados junto a todas las instituciones, pero estamos poniendo énfasis en que se trata de un lugar más chico que Buenos Aires, y que se puede encontrar a los responsables”, afirmó Donzis.
El atentado al cementerio de San Luis fue detectado el lunes 21 de diciembre, en horas de la tarde, cuando los empleados del cementerio judío constataron una profanación que no reconoce antecedentes en la provincia, con pintadas antisemitas en el muro perimetral y en 27 sepulturas, con apología del nazismo y profusos agravios, incluyendo cruces esvásticas y amenazas a los integrantes de la comunidad judía local.
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