Asimismo, situó como prioridad de su nuevo Gobierno el levantamiento del bloqueo impuesto a los palestinos, tras el inicio de la Intifada, el 28 de septiembre de 2000.
En un comunicado difudido por la agencia oficial de prensa palestina Wafa, Mazen afirmó que su Gobierno «continuará su labor de constitución de un Estado palestino independiente con Jerusalén como capital».
Según fuentes cercanas al primer ministro, éste anunció que le resultará difícil desplazarse a Washington, respondiendo a la invitación del presidente estadounidense, George W. Bush, hasta que no se levante el asedio a la Mukata.