El Vaticano instó a las autoridades del museo a efectuar "una nueva revisión objetiva y profunda" del texto en cuestión, según el cual Pío XII no protestó por el genocidio nazi de los judíos durante la guerra y que mantuvo una posición mayormente "neutral".
Benedicto XVI reiteró recientemente la afirmación de que Pío XII, quien asumió como pontífice en 1939, poco después del comienzo de la guerra, trabajó discretamente para salvar a todos los judíos que fuese posible. Como prelado italiano, Pío XII trabajó como diplomático en el Vaticano durante los años anteriores a la guerra.
"De todos modos, este hecho no puede ser considerado un factor determinante para tomar una decisión sobre cualquier visita del Santo Padre a Tierra Santa, un viaje que, como es sabido, figura entre los deseos del Papa, pero que por ahora no tiene planes concretos", dijo el vocero del Vaticano, el religioso Federico Lombardi, en una declaración.
Lombardi intervino después que un dignatario católico que promueve la causa en favor de la santidad de Pío XII concedió entrevistas el sábado en las cuales dijo que esa leyenda era el motivo principal por el que el Papa no puede viajar a Israel.
El religioso Peter Gumpel calificó ese texto como el motivo "más candente" de por qué no ha habido un peregrinaje de Benedicto XVI a Israel.
"¿Cómo puede ir allí sabiendo que esas leyendas no son históricamente verdaderas?", se preguntó Gumpel en una entrevista telefónica con The Associated Press. "Los católicos se ofenderían mortalmente", agregó Gumpel, un jesuita alemán que ha encabezado los esfuerzos para la beatificación de Pío XII, el paso anterior a la posible santidad.