Itongadol/AJN.- Rodrigo Duterte, conocido como "El Castigador", arribará a Israel la próxima semana donde visitará el Museo del Holocausto e inaugurará un monumento. Organismos de derechos humanos israelíes se oponen a la visita y denunciaron la venta de armas por parte de Israel a ese país.
La próxima semana arribará el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, conocido por sus polémicos dichos a lo largo de estos años, además de por sus duras políticas contra sus ciudadanos. En Israel varias organizaciones expresaron su oposición a la visita del líder, quien entre otras declaraciones dijo: "Hitler masacró a tres millones de judíos, ahora tenemos tres millones de adictos a las drogas, me alegraría matarlos".
Según informes publicados por organismos de derechos humanos internacionales, la Policía de Filipinas asesinó a 12 mil civiles, durante el mandato de Duterte, quien recibió el seudónimo de "El Castigador", por parte de la revista Times, según reprodujo el canal diez de la televisión israelí.
Sahara Vardi, activista de la organización Hamushim, un grupo antimilitarista israelí, se refirió a la llegada del presidente filipino a Israel. "Es un absurdo. Una persona que se compara con Hitler de manera positiva visitará el Museo del Holocausto Yad Vashem e inaugurará un monumento en memoria de los Justos de las Naciones", dijo.
Vardi se refirió al problema de las relaciones diplomáticas entre ambos países: "La situación interna de Filipinas es el principal problema, pero se hace con armamento israelí. Los consumidores de drogas son fusilados, entre otras armas, con fusiles Tavor, Negev, Galil y Spike. Esto quiere decir que tenemos un grado de responsabilidad en esto. La visita es la oportunidad para hablar de ello".
Consultada por la reunión que se prevé que Duterte mantenga con el presidente israelí Rivlin, la activista dijo que "Rivlin es una persona cuyas líneas morales son importantes para él en general, y esta es una oportunidad que tiene que mostrarlo".
Denuncia internacional
Familiares de ocho filipinos que fueron asesinados en el marco de lo que se conoce como "La Guerra contra las Drogas", dirigida por Duterte presentaron una demanda contra en la Corte de Justicia de la Haya, bajo cargos de asesinatos y crímenes contra la humanidad.
Las familias de los muertos piden el enjuiciamiento de Duderte por las decenas de miles de personas asesinadas desde que llegó al poder en el marco de una guerra brutal contra el narcotráfico. Según sostienen, en algunos casos los agentes de policía ejecutaron a civiles "sin vergüenza" y no fueron castigados. Los opositores a la campaña dirigida por el presidente dicen que son "perseguidos" y que las denuncias presentadas por las familias de las víctimas no han llegado a ningún lugar.