Itongadol.- Keren Leyedidut es una organización que diariamente renueva las posibilidades de la aliá, un tema tan importante en el mundo judío. “Nosotros no nos ocupamos de convencer a las personas de que hagan aliá, sino que nuestra labor es ocuparnos de que quien decida vivir en Israel tenga todas las herramientas necesarias para concretar el proceso”, afirmó en diálogo con ItonGadol, el director de Aliá y Absorción, Benny Hadad, quien estuvo de visita en Latinoamérica.
Hace más de 30 años, cuando caía la Unión Soviética y los judíos comenzaron a emigrar en masa a Israel, surgió en Estados Unidos la Fundación Internacional para la Amistad entre Cristianos y Judíos, el Keren Leyedidut. Fue fundada por el Rabino Iejiél Eckstein para estrechar relaciones entre cristianos y judíos, y enrolar a los cristianos evangélicos en pro de Israel.
La fundación se asentó hace dos años en Uruguay y Chile y recién este año lo hizo en Argentina. Con motivo de presentar la acción del Keren y evaluar acciones de articulación institucional para dar a conocer la ayuda que brinda el Keren Leyedidut a todos aquellos que quieran radicarse en Israel, estuvo de visita su director de Aliá y Absorción, Benny Hadad.
El Keren Leyedidut ofrece, a quienes deseen concretar su Aliá, un paquete de beneficios especiales que se suman a los que brinda el Ministerio de Absorción en Israel a los nuevos inmigrantes, y además ayuda a los israelíes que deseen volver a casa y que hasta ahora no recibían ningún apoyo.
Frente al repliegue de la Agencia Judía en algunos países, como por ejemplo en Chile, y su dedicación a la educación judía en la diáspora, es que Keren Leyedidut se presenta como una alternativa.
En diálogo con ItonGadol, Hadad, contó cuáles son las actividades y beneficios para quien decida hacer aliá. “Nuestra obra es ocuparmos de las personas que están interesadas en hacer aliá. Les damos información y los ayudamos en el proceso que están haciendo, nos encargamos del pasaje de avión, equipaje y todo”, comentó, a la vez que explicó que su trabajo continúa una vez “el olé haya llegado a Israel”.
“También los acompañamos cuando concretaron la aliá y ya se encuentran en el país. El departamento se llama Aliá y Klitá, no solo aliá, es decir que nos ocupamos también de la integración en el país. Todo olé que llega a Israel a través nuestro es recibido en el aeropuerto. Y durante su primer año en el país tenemos un equipo en Israel que está en contacto, realiza visitan a su casa, lo ayudamos con problemas que pueda tener y les asistimos en todo lo que pueda hacer más fácil el proceso de inserción en el primer año, porque siempre es el más difícil. Es importante que no se sienta solo”, remarcó. “Lo que hacemos es acompañarlo desde el momento en el que considera hacer aliá y en todo su proceso de aliá y el primer año en Israel”, sintetizó.
Para Hadad, “lo importante es crear una situación en la que los olim no se sientan abandonados o solos una vez en el país”. A modo de ejemplo dio: “Tenemos un grupo de Brasil en Tiberias y nuestro equipo preparó para el partido contra Serbia un evento con una pantalla grande para ver el partido. Eso crea ya una sensación de keilá, porque generalmente los olim vienen de keilot, y una vez aquí, sienten que la pierden y se sienten solos. Entonces, incluso un evento pequeño, de sentarse a ver un partido para todo el que llegó de Brasil y está en Tiberias, ayuda”.
Asimismo en “Jerusalem organizamos un seminario para que todo aquel que llegó de América Latina en los últimos seis meses y llevamos gente de Bituaj Leumí, Misrad Haklitá y otros organismos para que les expliquen sus derechos y lo que deben hacer para obtenerlos. La gente recibe las herramientas necesarias, para enfrentarse al proceso de inserción en el país. Estos son dos ejemplos. Para nosotros Aliá (inmigrar) y Klitá (Abosrción o inserción) es todo un proceso único”.
El Keren “está compuesto por un grupo de representantes en cada país” y ellos “nos acompañaron en nuestro viaje”. “Son parte de la kehilá local y dan servicio a quien esté interesado en hacer aliá. Nosotros no nos ocupamos de convencer a las personas, sino que lo que decimos es que, quien quiera hacer aliá, nosotros nos ocuparemos de que tenga todas las herramientas necesarias para concretar el proceso”, enfatizó. “No estamos en contra de ninguna kehilá de la diáspora, sino que estamos a favor de que quien de aquellas kehilot quiere hacer aliá, acompañarlo en el proceso y hacerlo de la mejor forma”, sintetizó.
A lo largo de sus muchos años de actividad, Keren Leyedidut apoyó la Aliá de judíos de comunidades en crisis, como lo fueron en su momento las de la ex URSS, de la ex Yugoslavia, de la India, de los países del Magreb y actualmente de Ucrania y Francia. Más recientemente aún, inició sus actividades en Venezuela y Uruguay, en Setiembre y Octubre de 2015 respectivamente, y continúa expandiéndose en España, Turquía y Portugal.
En este marco explicó: “Trabajamos en lo que fue la Unión Soviética, en Rusia menos por cuestiones con el gobierno, en Ucrania, Bielorrusia, Azerbaiyán, Georgia, Kazajistán, la mayoría de nuestros olim son de ahí, porque nuestro trabajo comenzó allí”. Keren Leyedidut está presente en zonas conflictivas donde la vida judía puede correr peligro, es por eso que “en Ucrania comenzó a raíz de la guerra civil y el tema de los refugiados”.
“Al principio nos ocupamos de los refugiados que escapaban de Donetsk a Kiev. También estamos en Francia, París, Marsella y las ciudades más importantes. En América Latina estamos en Brasil, Argentina y Uruguay que incluye otros países como Perú y Chile”, amplió.
Sobre su reciente visita y la impresión que le dejó América Latina, comentó: “Fue una visita muy importante y significó entender los procesos y lo que hacemos allá”. “Cada país es una historia diferente. Brasil es un país que está en una situación compleja. Y lo que me quedó de allá es una frase que alguien me dijo que es que la gente perdió las esperanzas, como resultado de lo que está aconteciendo allá. Creo que es una frase no simple de decir, pero dice mucho. La aliá creció tres veces en relación al promedio del historial de Brasil y por esto debemos dar respuesta a todas las solicitudes y gente que se acerque a preguntar porque en estas situaciones suele haber mayor demanda y debemos dar respuesta”, explicó.
En Argentina vimos que “es importante destacar a las kehilot del interior”. “Hay muchas que están dispersas en un territorio muy grande y hacen más aliá desde allí que de lo que hacen en Buenos Aires. Digamos que si el 80% de los judíos está en Buenos Aires y en el interior el 20%, de ese 20, hay más personas que hacen aliá. Por eso debemos dar más atención y dar mayor respuesta a esta demanda. Es una misión que nos estamos ocupando”.
De Uruguay dijo que “es una keilá pequeña”. “Allí nuestra misión es estar en contacto, como por ejemplo, ahora es importante estar en contacto con la gente de Chile. Nuestra misión en Uruguay es construir un sistema que dé respuesta a gente de diferentes países de la región”.
Además destacó el sionismo y el hecho de que la mayoría de las reuniones que mantuvo fueron en hebreo. “Me gustó mucho triunfar, como alguien que no habla el español, la mayoría de las reuniones de trabajo fueron en hebreo, ya que mucha gente de la kehilá habla hebreo, algo que no pasa en otros países. Vi mucho sionismo. Fue una experiencia muy buena para mí”, destacó.
También remarcó el hecho de la preservación de la memoria de la keilá en Argentina, a raíz del atentado a la AMIA en 1994, que se llevó 85 vidas y dejó cientos de heridos. “Estuve en la AMIA donde vi una fuerte memoria por el atentado. Aun habiendo pasado más de 20 años, vi mucha memoria y eso enseña cuán viva está y a la vez el hecho de seguir para adelante y no rendirse al terrorismo”, recordó a la vez que sentenció: “Esa la mejor respuesta”.