Agencia AJN.- Saeb Erekat, principal negociador palestino con Israel, sufre de fibrosis pulmonar y se encuentra en la lista de espera para el trasplante de pulmón en Israel o en EEUU.
El principal negociador palestino con Israel durante los últimos 20 años, Saeb Erekat, sufre de una enfermedad pulmonar muy grave y está en la lista de espera para un trasplante de pulmón en Israel o Estados Unidos. El jefe de inteligencia palestino, Majid Faraj, será el que lo reemplace cuando Erekat no esté en condiciones de trabajar.
La fibrosis pulmonar se caracteriza por el desarrollo de cicatrices en el tejido pulmonar, lo que dificulta su correcto funcionamiento. La enfermedad se manifiesta en falta de aliento, tos y pérdida de la capacidad de los pulmones para transferir oxígeno al cuerpo.
Erekat de 62 años, fue diagnosticado hace más de un año. Hasta ahora, había sido tratado con drogas, pero hace unos meses dejaron de ser efectivas y su condición empeoró dramáticamente. Comenzó tratamiento médico en uno de los hospitales de Israel en el centro del país, pero los médicos le dejaron claro que tenía que someterse a un trasplante de pulmón para sobrevivir. Desde entonces, ha estado en la lista de espera.
Los médicos israelíes son optimistas sobre sus posibilidades de recuperación si se somete a un trasplante. Mientras tanto, Erekat ha reducido significativamente su actividad pública. Rara vez celebra reuniones de trabajo diarias, entrevistas, y a veces lleva una máscara de oxígeno que le ayuda a respirar. Además tiene dificultades para caminar distancias cortas y necesita apoyo incluso cuando deja el coche en la entrada del edificio donde trabaja en Ramalá hasta que llega al ascensor.
Siguiendo la condición médica de Erekat, el presidente de la AP, Mahmoud Abbas, decidió que Faraj sea nombrado para reemplazarlo como jefe del equipo negociador desde el momento en que ya no pueda trabajar debido al trasplante o un mayor deterioro de su condición.
Faraj es conocido por sus buenas relaciones con los funcionarios diplomáticos en Occidente y en los países árabes. Mientras tanto, el liderazgo palestino está luchando con una ola de rumores sobre la condición médica de Abbas luego de que pasara unas horas en un hospital en Ramalá el pasado sábado.
Según fuentes palestinas, Abbas fue sometido a un chequeo de rutina, que generalmente hace cuando visita Amán, pero decidió esta vez evitar la coordinación de seguridad con Israel con respecto a su partida para Jordania. Otras fuentes afirmaron que esto no era un chequeo de rutina y que lo llevaron al hospital después de manifestar que no se sentía bien.
Abbas, de 82 años, es un fumador con antecedentes de cáncer y problemas cardíacos.