Itongadol/AJN.- La Mesa de Jóvenes de la comunidad judeoargentina, bajo el lema “#NoEsNatural”, conmemoró el 23 aniversario del atentado a la AMIA con un acto en la calle Pasteur al 600, la noche previa al 18 de julio.
Los jóvenes, que colmaron la calzada de la calle Pasteur desde su intersección con la calle Tucumán, se reunieron una vez más para decir presente por las 85 víctimas, por sus familias, por la búsqueda de la verdad, la justicia y defender el valor más importante que consiguieron tener: la memoria.
El lema “#NoEsNatural” se refiere a aquellas situaciones que, a partir del atentado, se volvieron comunes en nuestra realidad cotidiana: que no es natural vivir detrás de los pilotes; no es natural el terrorismo y no es natural juntarse a reclamar cada año por el fin de la impunidad.
El acto se inició con un momento musical a cargo de una banda de alumnos y ex alumnos de la escuela ORT y las palabras de quien fue su conductor, Facundo Arana, quien afirmó que “es un honor conducir el acto de la juventud y acompañar a los jóvenes en el 23 aniversario del cruel atentado a la AMIA, que dejó 85 víctimas, 85 familias golpeadas, 85 vidas truncadas”.
Arana destacó que, transcurridos 23 años, “lo que existe es memoria y lo que no existe es la justicia”.
Previo al acto, como ya es tradicional, se llevaron a cabo actividades vivenciales propuestas por la Mesa de Jóvenes y la intervención artística de la compañía Funciones Patrióticas.
Los representantes de la Mesa de Jóvenes expresaron que una vez más están “en la casa de todos los judíos, AMIA, otra vez para recordar, para exigir justicia” para que nunca vuelva a suceder otro atentado como el de la AMIA.
El objetivo es que no sean necesarios en las instituciones los pilotes, las puertas blindadas y las cámaras de seguridad, y que no se considere normal las medidas de seguridad, pues son el resultado de la falta de justicia y de la impunidad.
A continuación, se prendió una vela de Izcor (recordación) en memoria de cada una de las 85 víctimas fatales del atentado, mientras se daba lectura a sus nombres y los asistentes afirmaban “presente”. Luego se realizó un minuto de silencio en su homenaje.
Giselle Avruj, sobrina de Cristian Adrian Digitar, afirmó que, a partir del 18 de julio de 1994, el mes de julio tenía para ella una connotación dolorosa, pues le recordaba a su tío. Eso ocurrió hasta que hace dos años, también en el mes de julio, nació su hijo, a quien le cuenta como era Cristian.
Concluido el testimonio de Giselle Avruj, se proyectó el vídeo “Libro de la Memoria”, en el que más de 60 actores pusieron su talento para interpretar un guión, especialmente creado a partir de frases de 25 escritores argentinos.
El acto, cuya organización estuvo a cargo de Gaby Vilensky, culminó con la actuación de la banda Arbolito, cuyos integrantes expresaron su agradecimiento por haber sido invitados a participar de esta conmemoración.