Itongadol.- La junta de libertad condicional del Servicio Penitenciario de Israel decidirá el domingo el destino del expresidente, Moshe Katsav, que cumple una sentencia de siete años por violación. El haber cumplido más de dos tercios de su condena lo hace elegible para libertad condicional, sin embargo, las regulaciones lo obligan a admitir su culpabilidad y participar en sesiones de terapia de grupo. Según los oficiales de la prisión, Katsav, que no logró ganar la liberación temprana en una audiencia en agosto, ha comenzado a mostrar indicios de internalizar las implicaciones de sus acciones.
El presidente de la junta de libertad condicional ha aceptado aparentemente la decisión de Katsav de negarse a participar en la terapia de grupo debido a que, al ser una figura pública, sus declaraciones podrían salir en la prensa y dañar, aún más, su reputación. El ex presidente se ha reunido en privado con un trabajador social de la prisión que se espera, convenza a la junta de la libertad condicional que Katzav ha estado contemplando en sus acciones, incluso si no admite ninguna culpa.
A la luz de la opinión del trabajador social, la fiscalía estatal, que hasta ahora se ha opuesto a la liberación o incluso a otra audiencia de libertad condicional, está preparada para aliviar sus objeciones, aunque probablemente se opondrá a su liberación el domingo. La fiscalía ha sostenido en el pasado que las sesiones privadas con un trabajador social no son un sustituto de las sesiones de terapia grupal y se ha opuesto a la libertad condicional con el argumento de que los sentimientos de las víctimas de Katsav deben ser tomados en consideración.
Ahora, sin embargo, la fiscalía de la región central informó a la junta que si Katsav continúa reuniéndose con el trabajador social por otros seis meses y se detectan mayores progresos en su actitud, no se opondrá a su liberación.
El ex presidente, de 70 años, fue condenado el 30 de diciembre de 2010 por dos cargos de violación, entre otros cargos relacionados. Comenzó a cumplir su condena en la prisión de Ma\’asiyahu en diciembre de 2011 y está previsto que sea liberado en diciembre de 2018.
Katsav ha negado sistemáticamente cualquier delito y se ha presentado como una víctima. Sus solicitudes anteriores de liberación anticipada fueron rechazadas en parte debido a su negativa a expresar remordimiento por los ataques.
Si la próxima solicitud de libertad condicional es denegada, el último recurso de Katsav para acortar su condena será apelar la clemencia del presidente Reuven Rivlin. Ambos son antiguos colegas del Likud que sirvieron muchos años juntos en la Knesset antes de que Katsav ganara la presidencia.