Agencia AJN.-En el marco del brindis de Rosh Hashaná realizado este viernes, en el Hotel Alvear, tanto el diputado Waldo Wolff, como el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, criticaron el voto argentino en la Unesco, en la que se desconoce la conexión del pueblo judío con Jerusalem.
En el tradicional brindis organizado por el Congreso Judío Latinoamericano en el Hotel Alvear por Rosh Hashaná, Waldo Wolff, diputado nacional por Cambiemos, en diálogo con la Agencia AJN se manifestó por el voto de abstención de Argentina en la UNESCO: “Jerusalem es la capital indivisible y eterna del Estado de Israel, no coincido con Cancillería en este tema, y es un espacio abierto, nosotros no somos dogmáticos, y más yo como legislador, que mi voto siempre es personal y es prerrogativa del Poder Ejecutivo tener esa posición, puede gustarme o no, en mi caso particular no acuerdo, pero cuando uno integra un espacio político muchas veces, en algún tema particular, no coincide.”
Por su parte, el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, afirmó a AJN “la resolución de la UNESCO me parece que es un retroceso enorme que nos lleva a épocas superadas tanto por la UNESCO como por las Naciones Unidas, cuando inclusive se comparó el sionismo con racismo, con lo cual me parece que ha equivocado su rumbo y se ha sometido a poderes y a estados que plantean el odio, la división y otra vez traer tensiones".
Respecto al voto argentino, Caludio Avruj aseguró que "como judío, uno siempre espera la máxima, yo creo que es para reconocer y entender el cambio del voto, una vez que en la primera votación de mayo, había sido acompañando el voto árabe, hoy la Argentina trató de que eso no se aprobara; al no lograr que no se aprobara, presento un cambio, un voto de abstención, es un avance ¿es ideal? No, no es idea, pero es un voto importante”.
TAmbién la DAIA y la AMIA expresaron su molestia sobre el tema. Ariel Cohen Sabban, presidente de la DAIA, había asegurado: “Causa dolor; la Argentina debería revisar su política exterior”. En tanto, Ralph Thomas Saieg, vicepresidente a cargo de la presidencia de la AMIA, sostuvo que “el voto general de la Unesco es un bochorno y es sumamente injusto”.