Itongadol/AJN.- Durante su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas, el primer ministro Binyamin Netanyahu aseguró que “por primera vez, muchos países árabes en la región comprenden que Israel no es el enemigo, sino un aliado en la lucha contra ISIS e Irán, nuestros enemigos comunes”. La delegación de Kuwait, por primera vez, no abandonó la sala para no escuchar a Netanyahu.
Mientras el primer ministro dirigía la palabra ante la Asamblea General de la ONU y se refería al acercamiento y la mejora de las relaciones entre Israel y el mundo árabe, se produjo un hecho simbólico que podría demostrar que comenzaron nuevos tiempos. Los cuatro integrantes de la delegación de Kuwait ante Naciones Unidas permanecieron en la sala y escucharon con atención las palabras de Netanyahu, marcando una diferencia notable con la actitud que todo el bloque de “Países No Alineados” mantuvo durante décadas.
Las autoridades israelíes se rehúsan a especificar cuáles son esos países que han estrechado lazos con Jerusalem recientemente, pero se estima que Kuwait – uno de los países del Golfo amenazados por Irán y por ISIS – sería uno de ellos. De acuerdo con informes de medios no israelíes, existe una amplia cooperación entre los servicios de inteligencia de Israel y Kuwait, sobre la base de la preocupación común a los dos países por la expansión del islam radical, tanto sunita como chiita.
Con referencia a los estados árabes, Netanyahu habló en su discurso ante la Asamblea General sobre el “cambio significativo con respecto a Israel en el mundo árabe. Nuestros acuerdos con Egipto y Jordania son las anclas de estabilidad en el inestable Oriente Medio. Por primera vez en muchos países de la región, entienden que Israel no es el enemigo, sino un aliado contra Irán e ISIS. Creo que los próximos años trabajaremos juntos abiertamente para alcanzar estos objetivos”.