Itongadol.- Como todos los años en Irak el verano es caluroso, pero esta vez el país parece estar literalmente hirviendo. La ola de calor es extrema con picos de más de 50 grados, acercándose a 60.
Pero esto también está relacionado con el defectuoso estado del suministro eléctrico en todo el país. Cada año, los iraquíes sufren problemas en el servicio eléctrico, esta vez es algo que ni siquiera los ancianos de Bagdad recuerdan de muchos años. La semana pasada, entre el jueves y el viernes, hubo un colapso total del suministro en casi todos los distritos, excepto en la región autónoma kurda en el norte del país.
Entonces, la electricidad puede haber sido restaurada parcialmente, pero nada de fondo se resolvió y esta situación está generando una gran frustración entre los ciudadanos del país.
Algunos incluso salieron a manifestarse. En este contexto, el ministro de Electricidad, Majid Hanatush, renunció porque no ve cómo se puede resolver la situación.
Paralelamente, en los últimos días hubo repetidos intentos de afectar las líneas eléctricas en varias áreas. Es posible que algunos actores regionales estén aprovechando esta oportunidad, quizás el ISIS o milicias armadas relacionadas con Irán.
Irak logra producir entre 19 y 18 mil megavatios, en tanto que necesita 30. A los ojos de los iraquíes, el problema de la electricidad es uno de los peores males que simboliza dos fenómenos que representan la tragedia del gobierno iraquí: la falta de gobernanza y soberanía y la corrupción que invade en todas partes.