Itongadol.- En una operación conjunta de la Unidad de Fraudes del Distrito de Tel Aviv de la Policía de Israel y la Agencia de Seguridad de Israel (Shin Bet), un niño de 13,5 años de Tel Aviv fue detenido como sospechoso de llevar a cabo misiones en nombre de agentes iraníes.
Según la policía, la investigación reveló que, en las últimas semanas, elementos iraníes se pusieron en contacto con el menor a través de la aplicación de mensajería Telegram y le ofrecieron una compensación económica a cambio de realizar diversas tareas.
El niño aceptó y, siguiendo sus instrucciones, pintó grafitis con spray en la zona de Tel Aviv. Recibió un pago por sus acciones.
Además, se le pidió que fotografiara una batería del sistema Cúpula de Hierro, aunque finalmente no llevó a cabo esa tarea.
Tras su interrogatorio, el menor fue puesto en libertad bajo arresto domiciliario. Sus padres fueron informados durante toda la investigación.
La policía y el Shin Bet hicieron hincapié en que «las entidades de inteligencia y terrorismo continúan sus esfuerzos por reclutar israelíes a través de las redes sociales para promover actos de terrorismo dentro de Israel».
Este incidente se produce tras la acusación presentada la semana pasada por la Fiscalía del Estado contra un residente de 30 años del este de Jerusalem, acusado de mantener contacto con un individuo que afirmaba ser agente de los servicios de inteligencia iraníes y de realizar tareas a cambio de una remuneración.
Según la acusación, el acusado recibió 2000 NIS del agente iraní para llevar a cabo un acto con un mensaje político dentro de Israel.
Según se informa, se le ordenó colgar un cartel a la entrada del túnel Naomi Shemer en Jerusalem con el siguiente mensaje: «Bibi dictador, no somos maleza. Ronen Bar, te apoyamos», una mención directa al jefe del Shin Bet, expresando su apoyo a él frente al primer ministro Benjamin Netanyahu.
La acusación alega además que al acusado se le ofrecieron 10 000 NIS adicionales por provocar un incendio forestal el Día de los Caídos, pero que lo rechazó por miedo a ser descubierto.