Itongadol.- El ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, insinuó el sábado la posibilidad de atacar a los yihadistas islámicos, que podrían ser vistos en «restaurantes y hoteles de Teherán, Siria y Líbano». En respuesta a las expresiones de Gantz, el líder de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah, advirtió que cualquier intento israelí de ampliar sus ataques contra militantes palestinos al Líbano tendría consecuencias.
«Cualquier ataque contra cualquier ser humano no quedará impune ni sin respuesta», aseguró Nasrallah en un discurso televisado con motivo de la Ashura, una conmemoración melancólica para los musulmanes chiíes del asesinato del nieto del profeta Mahoma, Hussein.
Los comentarios se produjeron tras el recrudecimiento de la violencia entre Israel y el movimiento de la Yihad Islámica Palestina (PIJ) en la franja de Gaza, provocado por la detención por Israel de un alto dirigente de la PIJa principios de este mes.
El lunes, un día después de que una tregua mediada por Egipto pusiera fin a la violencia en Gaza, Gantz señaló que Israel podría llevar a cabo «ataques preventivos» en el extranjero.
Tras referirse a la posibilidad de atacar a los funcionarios de la PIJ en Irán, Siria o Líbano, Gantz agregó que «ellos también tendrán que pagar el precio».
«También en el futuro, si es necesario, realizaremos un ataque preventivo para defender a los ciudadanos, la soberanía y las infraestructuras de Israel, y esto es válido para todos los frentes, desde Teherán hasta Jan Yunis», concluyó Gantz.
Hezbollah, respaldado por Irán, se opone con vehemencia a Israel y las tensiones entre ambos se intensificaron en los últimos meses a causa de la disputada frontera marítima entre Líbano e Israel.