Itongadol.- La organización terrorista palestina Hamás, que busca un acuerdo global con Israel en virtud del cual cedería la gobernanza de la Franja de Gaza sin llegar al desarme total, afirmó a los mediadores árabes que el grupo está dispuesto a iniciar una tregua a largo plazo durante la cual detendría todas las operaciones militares, incluyendo el desarrollo de armas y la excavación de túneles.
La tregua formaría parte de un acuerdo más amplio con Jerusalem que Hamás desea para finalizar la guerra en el enclave costero palestino, desencadenada por la masacre del 7 de octubre de 2023.
Además, la organización terrorista también estaría dispuesta a ceder el control del gobierno de Gaza a un órgano independiente de tecnócratas palestinos, tal como prevé una propuesta egipcia para la administración de la Franja tras la guerra.
Así lo confirmó este domingo el medio de comunicación hebreo Times of Israel, citando a dos fuentes familiarizadas con el asunto que permanecieron anónimas.
Para imponer el cese de las actividades militares contra el Estado judío, algunos funcionarios de Hamás se mostraron dispuestos a que todas las armas del grupo sean depositadas en un almacén vigilado, agregó el reporte.
Con respecto a la duración del alto el fuego, Hamás está dispuesto a que dure cinco, diez e incluso quince años. La propuesta va más allá de lo que el grupo estuvo dispuesto a hacer en el pasado.
Sin embargo, no parece ser viable por seguir estando lejos de una de las exigencias irrenunciables de Israel: el desarme total de la organización terrorista.
El acuerdo global que los negociadores de Hamás propusieron a los mediadores árabes contemplaría la devolución de los 59 rehenes israelíes restantes -entre vivos y muertos- en una sola tanda a cambio de un número acordado de reclusos palestinos, detalló el informe.
Asimismo, este pacto también contemplaría un alto el fuego permanente, la retirada completa de las fuerzas israelíes de Gaza, la reapertura de los pasos fronterizos para permitir la entrada de ayuda humanitaria y el inicio de la reconstrucción de la Franja.
Del lado israelí, el primer ministro Netanyahu reiteró su oposición a un acuerdo de este tipo, dejando en claro que no finalizarán la guerra ni se retirarán del enclave costero palestino, más allá de que esto supusiera la liberación de los 59 secuestrados, argumentando que, en el caso de hacerlo, dejarían a Hamás en el poder en Gaza, un resultado que él no permitirá.