Itongadol.- En el Likud, partido del actual primer ministro de Israel, Binyamin Netanyahu, continúa con sus intentos de frustrar la formación de un nuevo gobierno liderado por Naftali Benent y Yair Lapid.
En la radio estatal de Israel (KAN) se informó esta mañana que la decisión anoche del partido de Netanyahu de reservar lugar en las listas para desertores fue parte de los últimos intentos para que Ayelet Shaked abandone el partido Yamina, comandado por Bennet, lo que fue rechazado.

Naftali Bennet, Yair Lapid y Gideon Saar. Foto: Flash 90.
La propuesta a Shaked fue amplia e incluyó ocupar el segundo puesto en la lista de Likud, el cargo de ministra de Relaciones Exteriores (en un gobierno que se cree antes o después de las elecciones) y la creación de la «Facción Shaked» dentro de las filas del Likud, que la incluya y a otros tres miembros que ella misma podría elegir para su propio espacio.
Esto generaría su propia facción, con cuatro escaños, por lo que podría separarse del Likud después de las elecciones y convertirse en un espacio independiente en la Knesset. Todo esto, a fin de «torpedear» al gobierno de Bennett-Lapid.
Naftali Bennet recibió ataques de sectores duros del judaísmo ultraortodoxo y es así que el viceministro Uri Malkev, de Yeadut HaTorá, expresó en declaraciones radiales a Reshet Bet que «el Gobierno de Lapid y Bennet no quiere los partidos ultraortodoxos».
«Está escrito en el acuerdo. Esto fue declarado explícitamente por un miembro de la coalición, que no quiere a los religiosos», indicó el viceministro.
Anoche la televisión estatal informó sobre una reunión que tuvo lugar el sábado por la noche entre Avir Kara, de Yamina, y el presidente de Yeadut Hatorá, Moshe Gafni, en la que no se lograron acercar posiciones.

Avigdor Lieberman y Yair Lapid. Foto: Miriam Alster, Flash 90.
Emisarios de Netanyahu
Fuentes de los partidos ultraortodoxos señalaron, citados por KAN, que el fuerte ataque al posible primer ministro, Naftali Bennett, por parte de los jefes de los partidos ultraortodoxos, Aryeh Deri, Moshe Gafni y Yaakov Litzman, se produjo a pedido de Binyamin Netanyahu.
Una fuente del Yeadut HaTorá criticó la movida y dijo: “Fue un error. El ataque fue temprano y fortaleció a Bennett en el sionismo religioso».
En tanto, el comité organizador aprobará hoy la fecha del juramento del nuevo gobierno para el domingo a las 16 horas.
La fecha fue fijada ayer por el presidente de la Knesset, Yariv Levin.