Itongadol.- El Ministerio de Salud informó hoy que 159 israelíes dieron positivo por coronavirus durante la primeras horas del lunes y se contabilizaron 492 nuevos casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, lo que obligó al gobierno a reunirse para analizar nuevas restricciones.
La Oficina del Primer Ministro publicó hoy una lista de las nuevas restricciones aprobadas por el denominado gabinete de coronavirus para frenar el aumento de nuevas infecciones por COVID-19.
En principio se limitó la capacidad en salones de eventos y eventos culturales a 250 personas, mientras que la participación en circuncisiones se fijo a 50 personas. Las bodas se establece un máximo de 100 personas en lugares cerrados y a 250 afuera a partir del 9 de julio. Asimismo se restringen otras reuniones de culto a 50 personas.
Además se permiten que los exámenes universitarios se realicen de forma remota y dispuso también que un 30 por ciento de los trabajadores del sector público trabajen desde casa.
La cantidad de pacientes con coronavirus hospitalizados en estado grave aumentó en un 18% desde la noche del domingo y la tarde del lunes, según consignó el portal de noticias Ynet.
El parte del Ministerio de Salud registró 492 nuevos casos de COVID-19 en las últimas 24 horas, en momentos que los ministros del gobierno se reúnen para decidir si reintroducir las restricciones establecidas por la pandemia.
Según el Ministerio de Salud, otra persona murió a causa del virus, lo que lleva el número de víctimas nacionales desde el inicio de la pandemia a 319. No hubo detalles inmediatos sobre la última muerte.
El número total de casos llegó a 23.989, de los cuales 17.114 se han recuperado. De los 6.556 casos activos, 46 estaban en estado grave, 24 con ventiladores. Otros 58 estaban en condiciones moderadas y el resto presentaban síntomas leves o eran asintomáticos. El ministerio dijo que se realizaron 10,138 pruebas el domingo.
En Jerusalem se diagnosticaron 100 casos nuevos de coronavirus en los últimos tres días, seguido de Ashdod con 74. La ciudad ultra ortodoxa de Bnei Brak vio 60 casos nuevos desde el fin de semana, mientras que Tel Aviv-Jaffa contabilizó 48, según indicó el diario The Times of Israel en su sitio web.
La ciudad beduina de Ar’arat an-Naqab en el Negev cuenta con la tasa más alta de propagación de infección en el país en relación con su población, con 27 nuevos diagnósticos en los últimos tres días.
La cantidad de casos de virus activos se ha disparado en más de 4.000 desde el 1 de junio, luego de que el gobierno reabrió la economía y las escuelas en mayo.
Ministros de alto rango en el llamado gabinete de coronavirus se reunieron el lunes para discutir si se deben restablecer las regulaciones de emergencia, incluida una posible reducción de bodas y otros eventos masivos.
En este contexto el director general del Ministerio de Salud, profesor Hezi Levi, indicó que el ministerio podría recomendar al gobierno que prohíba al público israelí reunirse con sus familiares mayores debido al continuo resurgimiento del coronavirus en el país.
Los comentarios surgieron antes de la reunión del gabinete de coronavirus, que debatirá si volver a imponer algunas de las restricciones de movimiento para combatir la rápida propagación de COVID-19.
En una entrevista con Ynet, el director general dijo que la alta tasa de infección pone a la población anciana en el país en mayor riesgo y provocaría casos más graves e incluso muertes.
“Si vemos un mayor aumento de la infección, la prohibición de los encuentros con los abuelos está sobre la mesa”, dijo. “Permitiremos visitas entre adultos con mascarillas y reglas de distanciamiento social”.
Dijo que los funcionarios del ministerio, que asistirán a la reunión del gabinete, exigirán que se restrinjan significativamente los eventos públicos y las reuniones sociales.
Por su parte, el ex ministro de Salud Yakov Litzman (UTJ) envió una carta presentando su postura con respecto al aumento actual de las infecciones por COVID-19 y recomendó cerrar las escuelas de inmediato.
Litzman, quien actualmente se desempeña como Ministro de Vivienda de Israel, afirmó: “Mi opinión es que debemos cerrar las escuelas, que son la principal fuente de infección”. “Está claro para todos que no se puede esperar que los niños pequeños usen máscaras y se adhieran a las reglas de higiene adecuadas y necesarias. Por lo tanto, no hay otra opción que permanecer en casa hasta que las cosas se calmen”, argumentó.
“Creo que en este momento, deberíamos poner límites al baño en la playa y a las reuniones en lugares de entretenimiento”, agregó, y señaló que las pautas de coronavirus se han violado repetidamente en estos lugares.
Según el portal de noticias Arutz Sheva, Litzman también cuestionó por qué el gobierno está discutiendo dividir a los estudiantes en “cápsulas” en la escuela, pero se niega a discutir la implementación de un proceso similar para las sinagogas. También cuestionó los bloqueos en áreas haredi, alegando que las ciudades con tasas de infección similares pero que no eran religiosas, no estaban cerradas.
“Debemos asegurarnos de que todas las decisiones sean iguales, sin ninguna conexión con la población”, dijo, y enfatizó que las decisiones deben tomarse “por consideración a la salud pública y con la máxima transparencia”.