Itongadol.- Israel tiene la obligación moral de intentar poner fin al sufrimiento humano en la guerra de Ucrania, dijo el primer ministro Naftali Bennett al comienzo de la reunión del gabinete del domingo.
Las declaraciones se produjeron poco después de que Bennett hablara con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky el domingo, por tercera vez en 24 horas, poniéndolo al día sobre su viaje a Moscú, donde se reunió con el presidente ruso Vladimir Putin, y luego a Berlín, para reunirse con el canciller alemán Olaf Scholz.
«Fui a Moscú y a Berlín para tratar de ayudar a entablar un diálogo entre todas las partes, con la bendición y el ánimo de todos los actores», dijo Bennett.
Bennett dijo que «aunque las posibilidades no son grandes», considera que es «responsabilidad moral de Israel hacer todos los intentos», porque tiene buenos contactos con ambas partes del conflicto.
«La situación sobre el terreno no es buena», añadió. «El sufrimiento humano es grande y puede ser aún mayor si las cosas siguen por el camino actual. Hay israelíes que necesitan volver a casa y comunidades judías en apuros que necesitan ayuda.»
Parafraseando un conocido adagio rabínico según el cual «mientras la vela esté encendida, hay tiempo para arreglar las cosas», Bennett dijo: «Mientras la vela esté encendida, debemos intentarlo, y tal vez aún podamos actuar».
Además, Bennett dijo que Israel se está preparando para una gran ola de Aliá (inmigración judía). De hecho, según un comunicado de la Administración de Pasos Fronterizos, Población e Inmigración de Israel publicado el viernes, desde el comienzo de la invasión rusa ingresaron al Estado Judío más de 1400 ucranianos.
«Este es un desafío para el Estado de Israel, pero es un desafío que hemos resistido en el pasado, una y otra vez», dijo. «Momentos como éste, en el que el mundo se enfrenta a una convulsión y los judíos ya no están seguros donde están, nos recuerdan a todos lo importante que es que haya un hogar para los judíos, sean quienes sean, y lo importante que es que tengamos el Estado de Israel».
Las declaraciones de Bennett se produjeron horas después de su regreso a Israel tras su viaje a Moscú y Berlín.
Bennett y Zelensky hablaron dos veces después de la reunión con Putin el sábado, y el presidente ucraniano también fue informado antes de la reunión. El primer ministro israelí también llamó al presidente francés Emmanuel Macron.
Bennett se reunió con Scholz durante una cena de hora y media a última hora de la noche del sábado, en la que hablaron de la guerra en Ucrania.
Zelensky había pedido a Bennett que intentara organizar una cumbre con Putin en Jerusalém antes de que Rusia invadiera su país, y desde entonces pidió al primer ministro israelí que medie entre Ucrania y Rusia.
Bennett y Putin hablaron de la guerra en Ucrania, incluida la situación de los israelíes y de las comunidades judías como consecuencia del conflicto, dijo una fuente diplomática.
Putin y Bennett acordaron continuar con el mecanismo de desconflicción en Siria, informó el Canal 12 de Noticias. Jerusalém coordina con Moscú antes de los ataques aéreos contra objetivos iraníes en Siria, donde el Ejército ruso es la fuerza dominante.
Desde que Rusia invadió Ucrania, Israel ha estado tratando de equilibrar la importancia para la seguridad nacional de la coordinación con Rusia con la alianza estratégica más fuerte de Israel con Estados Unidos y el apoyo a la democracia y el orden internacional.
Israel condenó la invasión rusa de Ucrania a través del ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, y de una votación en la Asamblea General de la ONU, pero Bennett se mostró reticente a hablar de Rusia.
El primer ministro israelí fue el primer líder de una democracia que se reunió con Putin desde que Rusia invadió Ucrania hace 10.
Bennett coordinó previamente su viaje a Moscú con Estados Unidos, Francia y Alemania. También se informó a Turquía, ya que la ruta de vuelo de Bennett pasaba por su territorio.
Tanto Bennett como el ministro de Edificación y Construcción, Ze’ev Elkin, que hizo de traductor, observan el shabat (día de descanso en la religión judía). Volar el sábado indica que había una necesidad urgente de seguridad nacional.