Itongadol.- Un amplio centro judío se inauguró en Tomsk, una de las ciudades más antiguas de Siberia, que actualmente tiene más de 500.000 habitantes.
El edificio inaugurado tiene una superficie de aproximadamente 2300 metros cuadrados, y fue construido con la ayuda de líderes del movimiento jasídico Jabad Lubavitch y donaciones de filántropos judíos de todo el mundo, según declaró el rabino Levy Kaminetzky, sheliaj de Jabad en Tomsk. Se estima que unos 200 niños judíos asistirán a las clases y actividades que allí se desarrollarán, además de los adultos, y que también habrá actividades extracurriculares para hijos de no judíos.
En la ciudad Tomsk, ubicada a 3600 kilómetros de Moscú y al este de los Montes Urales, vivieron decenas de miles de judíos, especialmente miembros de la comunidad local de cantonistas, y ex soldados que habían sido reclutados contra su voluntad o secuestrados en el ejército del zar ruso y se les prohibió practicar su fe, que al concluir su servicio forzado volvieron a practicar el judaísmo y se afincaron en Tomsk.
Cuando se instauró el gobierno comunista en la ex Unión de Repúblicas Socialista Soviéticas (URSS), los gobernantes cerraron las dos instituciones religiosas judías de la ciudad. Casi un siglo después, se inauguró el Centro Judío de la ciudad, con la asistencia de unas 400 personas, incluido el gran rabino de Rusia, Berel Lazar, que viajó especialmente desde Moscú.
La reconstrucción de las instituciones de Tomsk comenzó en 1999, luego de la disolución de la URSS en 1991, cuando las autoridades devolvieron a la comunidad judía de la ciudad uno de los edificios que había servido de sinagoga antes de ser incautado. Finalmente en 2018 las autoridades de Tomsk devolvieron la que había sido la sinagoga de los cantonistas, una estructura de madera casi en ruinas que se está tratando de restaurar.
En Siberia funcionan centros judíos en las ciudades de Novosibirsk y Krasnoyarsk, también dirigidas por rabinos de Jabad Lubavitch, pero son mucho más pequeñas que la recientemente inaugurada.