Itongadol.- «Mis amigos me dijeron que estaba loca y estoy animando a algunos para que vengan a Israel» Comentó a Itongadol, Vania Rosario Benavente, la joven peruana que viajó a Israel para completar sus estudios
En el marco de la visita de Iton Gadol a la Universidad de Tel Aviv en Israel, Vania Rosario Benavente, una joven nacida en Perú que decidió mudarse para completar sus estudios en el Estado de Israel, nos contó algunos detalles sobre su experiencia al momento de mudarse desde Perú a Israel.
¿Qué haces en Israel?
Vine a estudiar. Estoy haciendo una maestría de resolución de conflictos y mediación, que lo arranqué la semana pasada. A Israel llegué el 19 de septiembre pero las primeras dos semanas hice la cuarentena obligatoria, por lo que casi no salí. Mi primer día libre arrancaba la maestría.
¿Cómo se dio tu llegada a Israel?
Yo estaba buscando esta maestría porque me interesaba mucho, y encontré una en Perú que tiene el mismo nombre, pero mi hermana mayor, que vive en Israel hace varios años, me aconsejó buscar estudiar acá, ya que no hay mejor lugar que Israel para estudiar resolución de conflictos y mediación.
¿De qué tipo de conflictos estamos hablando?
Estamos hablando de conflictos en general. Yo soy ingeniera industrial, así que lo veo como que esto se puede aplicar con las compañías, con el personal, digamos en el área de los recursos humanos, de hecho yo trabajo en RR.HH., y me interesó por eso. También lo veo como proyectos que se pueden realizar en pequeñas comunidades que de repente se oponen a la realización de un proyecto específico, porque no tienen la suficiente información, entonces hay que mediar y llegar a un acuerdo con ellos para que se lleven a cabo los proyectos.
¿Cómo llegó tu hermana a Israel? ¿Cuál fue el disparador?
Mi hermana es mayor, tiene 9 años más y es ingeniera en sistema y como en Israel hay mucho más trabajo y alta tecnología se vino para acá. Hace 13 años que vive en Israel, hoy tiene 35. Viajó sola, se estableció acá y comenzó a estudiar y a hacer cursos complementarios y con uno de esos cursos consiguió hacer una pasantía y ya decidió quedarse en Israel. Mi hermana vino principalmente por la oportunidad, ella estaba buscando aprender más de tecnología porque quería ser programadora, y en Perú no estaba muy desarrollado por lo que tenía que salir al extranjero, buscaba países que se enfoquen en la tecnología y por eso eligió Israel. Nosotros somos una familia emprendedora, de hecho la mayoría de mis primos viven en el extranjero. Mis padres están en Perú ahora pero van a venir el mes que viene de visita.
¿Qué pasó con tus amigos y familiares cuando les dijiste que te venías a Israel?
Mis amigos me dijeron que estaba loca y que me iba a perder, porque era un país muy lejano y yo no hablo nada de hebreo. Pero yo sabía que este era mi camino. Yo creo que lo que les asusta es el tema de las guerras, apenas sale una noticia relacionada con el tema me llaman, porque con eso se asustan y preocupan.
¿Percibiste la cantidad de culturas diferentes que forman la sociedad israelí?
Dentro la universidad he visto árabes y también a las chicas con el hiyab, pero no he tenido mucho la oportunidad de interactuar, ya que en mi salón la mayoría son estadounidenses, por lo que no he interactuado tanto con personas de otras culturas.
¿Notas que la Universidad es abierta en ese sentido?
Sí, se nota desde que entras. Es un mix de culturas en general. Y dan oportunidades a cualquier persona que deseé estudiar acá, de hecho para mí, aplicar ha sido bastante sencillo, no tuve complicaciones en ningún momento. Si mandaba algún correo me lo respondían súper rápido y todo fue muy sencillo. Además, desde que llegamos nos programaron actividades para jóvenes que son muy interesantes. Por ejemplo mi primer tour organizado por la Universidad fue uno de comida, en el que íbamos caminando por los barrios y pasábamos por diferentes restaurantes internacionales de muchos países, y aprendimos sobre la comida filipina, china y varias más. También hicimos un tour de grafitis, y nos mostraron cuales son los más importantes. Para nosotros es re interesante, porque son cosas que salen de lo normal, ya que lo común es hacer tours por lugares culturales, pero con esto nos enseñan y nos muestran otro costado de la sociedad y del país.
¿Tuviste algún tipo de vínculo con la Embajada de Israel en Perú?
Sí, para solicitar la visa y poder venir a estudiar.
¿Conocés más peruanos que estén viviendo en Israel?
Por el momento solo a mi hermana.
¿Pudiste compartir con tus amigos y familiares cómo estás viviendo la experiencia de estudiar en Israel?
Sí, es más, yo creo que estoy animando a algunos para que vengan a Israel, no sé si a estudiar, pero si hay varios que quieren venir a conocer el país. El problema más que nada para ellos, al menos los que quisieran venir a estudiar, es que tienen que esperar un año más, porque ya comenzó el año lectivo.
¿Creés que puede ocurrir eso, que vengan amigos tuyos a estudiar a Israel?
Yo creo que sí, que podrían animarse. Aunque me parece que les da un poco de miedo el tema de la comunicación, por la dificultad del hebreo. Por ejemplo a mi me pasó de ir a la farmacia y no saber cuál era el shampoo y cuál la crema enjuague, ya que estaban todas las letras en hebreo y nada en inglés. Pero es algo que se puede resolver preguntando y la gente te ayuda, aunque en primera instancia me sentí perdida.
¿Hay más latinoamericanos en la Universidad?
Sí, en mi salón de hecho hay un mexicano. Incluso me sorprendió que el primer día, cuando llegué, conocí a este chico mexicano. En mi curso la mayoría hablan castellano y me pasó también de que varias personas me dijeron que tenían conocidos peruanos.
¿Es como el Arca de Noe?
No te lo esperas, pero es un mix de culturas de todos lados y te hacen sentir bienvenida. Y eso que todavía no salí de la Universidad casi.