Itongadol.- Al parecer, Estados Unidos está considerando la posibilidad de tomar medidas para impedir que Israel utilice armas estadounidenses en una ofensiva prevista en la ciudad meridional de Rafah, en la Franja de Gaza.
El columnista David Ignatius afirmó en el Washington Post que el presidente estadounidense Biden y otros funcionarios «no tomaron ninguna decisión sobre la imposición de ‘condicionalidad’ a las armas estadounidenses. Pero el mero hecho de que los funcionarios parezcan estar debatiendo esta medida extrema muestra la creciente preocupación de la administración por la crisis en Gaza».
«Si Israel lanza una ofensiva en Rafah sin proteger adecuadamente a la población civil desplazada, podría precipitar una crisis sin precedentes en las relaciones entre Estados Unidos e Israel, incluso en lo que se refiere al suministro de armas», agregando, citando a Martin Indyk, ex embajador de Estados Unidos en Israel.
Además, la publicación advierte que Estados Unidos parece haber abandonado sus esperanzas de una iniciativa diplomática que combinara la normalización saudí con una vía hacia un Estado palestino.
Ignatius, a quien a veces se considera una clave del pensamiento de la administración, telegrafía las profundas frustraciones de la Casa Blanca con el primer ministro Netanyahu.
En ese sentido, el periodista hizo hincapié en que «detrás de la creciente tensión con Netanyahu está la sensación de Biden de que Israel no escuchó las advertencias y consejos de Estados Unidos, y que la relación entre Estados Unidos e Israel fue una calle de sentido único».
«La administración siente que apoya los intereses israelíes, a un costo político considerable dentro y fuera del país, mientras que Netanyahu no responde a las peticiones estadounidenses. Israel argumenta que cualquier espacio entre la política estadounidense y la israelí sólo beneficia a Hamás. Pero Israel no hace concesiones para reducir ese espacio», concluyó Ignatius.